Es pequeña en tamaño pero grande en beneficios. La semilla de la chía se ha vuelto popular en las cocinas costarricenses, gracias a la amplia cantidad de nutrientes que aporta al organismo.
Son buenas para los vegetarianos, los veganos y quienes son intolerantes al gluten; disminuyen la cantidad de grasa en el cuerpo; absorben las grasas saturadas y ayudan a quemar calorías; reducen el colesterol y los niveles de azúcar; favorecen la regulación del tránsito intestinal y ayudan a la regeneración de la masa muscular.
¿Le parece muy bueno para ser cierto? Pues tome nota porque estos beneficios y otros más los encuentra en estas pequeñas semillitas.
Súmele a todo esto que ayuda a bajar de peso. La chía es capaz de absorber 12 veces su volumen cuando se mezcla con agua; por esta razón, produce una sensación de llenura y saciedad que evitará que usted ingiera grandes cantidades de comida.
La chía es rica en Omega 3, ácidos grasos naturales, proteínas, fibras, aminoácidos, antioxidantes, vitaminas y minerales. Todo un combo especial para la salud y ¡es barato!; además, se consiguen los paquetes de chía en cualquier supermercado o macrobiótica.
Se puede consumir a cualquier hora del día, con bebidas y alimentos. Es una pequeña caja de sorpresas.
En la dieta . De acuerdo con Aldo Sánchez, del restaurante Mantras Veggie Café and Teahouse, la semilla es fácil de mezclar. “Tiene un sabor particular que sabe bien con otros ingredientes como el cacao o los arándanos”, explicó.
En su restaurante preparan diferentes platos, entre ellos ricos postres. En el caso de la repostería se utiliza para sustituir la clara de huevo.
“Cuando se remoja se parece al chan y se hace una textura como gelatinosa, por lo cual sustituye al huevo en las recetas de queques porque sirve para amarrar los ingredientes”, explicó el experto.
Las semillas también se pueden moler y hacer en polvo para agregar a la preparación. Además, se puede usar de forma libre en las bebidas hechas a base de frutas.
Para las ensaladas es excepcional: basta poner unas cuantas semillas sobre los vegetales y listo.
Su sabor es parecido al de las nueces, por lo tanto es suave al paladar y no provoca cambio en el sabor de los alimentos con los cuales se combina.
Milenaria. Aunque en Costa Rica recientemente ha tomado fama, la semilla de chía alimenta a muchos desde hace miles de años.
La historia cuenta que los guerreros aztecas podían pasar un día entero sin necesidad de comida, solo ingerían una poca cantidad de semillas de chía y estas les daban los nutrientes necesarios para mantener la energía durante el día.
La planta es originaria de México y Guatemala y su uso se remonta a la época precolombina; como siempre, nuestros ancestros siguen demostrando su conocimiento.