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La primera estampilla en el país circuló en 1863 con valores de medio y dos reales
Como conmemoración de los 150 años de la primera estampilla producida por Costa Rica se inauguró este lunes la primera exposición nacional de filatelia y el primer congreso de filatelia temática organizada por Federación de Entidades Filatélicas de Costa Rica (Fencori).
Además de la exhibición y el congreso, que concluirán el próximo jueves, las estampillas serán parte de una competencia en la que un jurado compuesto por siete expertos en el tema (cinco costarricenses, un español y un portugués) analizarán, juzgarán y calificarán las colecciones concursantes de varios países.
Las primeras estampillas de Costa Rica, presentes en la exposición, se hicieron para los valores de medio y 2 reales en el año 1863, un año después de que Nicaragua tuviera su primer sello postal y 23 años después de que se imprimiera el primer sello en Gran Bretaña en 1840.
La primera oficina central de correos en Costa Rica abrió sus puertas en 1849, lo que quiere decir que el país tardó 14 años en producir sus primeras estampillas.
Además de tener las primeras estampillas hechas en el país centroamericano, también hay colecciones de Brasil, Panamá, Alemania y Argentina con cientos de sellos postales de diferentes hechos en distintas épocas, de los inicios de 1900, de la Segunda Guerra Mundial hasta el presente.
El miembro del jurado de la competencia, el costarricense Enrique Bialikamien afirmó que en Costa Rica la filatelia es un pasatiempo “que se ha cuidado mucho en su desarrollo”.
El coleccionista dijo que Costa Rica “es muy reconocida en el ámbito internacional y ha recibido premios en distintas exposiciones internacionales (de filatelia)”.
Una práctica común debido al ávido coleccionismo y el aumento en el valor de las estampillas por la escasez que se produce con el pasar del tiempo, es la falsificación de los sellos postales, lamentó el experto.
“La primera emisión (de las primeras estampillas costarricenses) tuvo varias falsificaciones, en ese momento también los falsificadores se aprovechaban. En Europa las vendían sueltas como si fueran originales”, dijo Bialikamien.
Según el juez de la competencia, Fencori asiste a todas las exposiciones de filatelia que se organizan alrededor del mundo.
“Este año hubo tres, una en Indonesia, una en Tailandia y ahora habrá una en Brasil”, indicó.
