¡Pst, niños, es momento de soñar!

Las imágenes hechas poesía y las historias contadas de maneras fantásticas, se mezclan de forma ingeniosa en el Festival de Teatro Infantil Educarte. Todo esto tiene un solo objetivo: estimular la imaginación de niños y jóvenes, y que ellos sueñen sin límites.

Este festejo llega este 2011 a su primera década de vida, y celebran este aniversario con una amplia oferta de montajes, que se extenderá hasta el 11 de setiembre. De esa manera, los niños de siete años y los adolescentes de 14 y 15 años tendrán producciones pensadas en ellos.

El festejo ya comenzó. Las primeras obras en presentarse fueron La ventana mágica, del proyecto cultural La Pulpe, el domingo en Sabanilla, e Historias cabécares, de la Compañía La Bicicleta, que se presentó ayer, en Ciudad Neily.

Sin embargo, el grueso de las actividades comenzará este sábado. Por Costa Rica también participarán El Papel Proyectos Teatrales, con la obra Sancho Panza Gobernador. Esta propuesta dirigida por Melvin Méndez se inspira en el capítulo 40 de la novela El ingenioso hidalgo don Quijote de la Mancha, que es cuando hacen creer a Sancho que fue nombrado gobernador de una ínsula.

Méndez explicó que, desde el estreno de la obra en el 2009, es testigo de reacciones muy positivas del público infantil, en parte porque se ven seducidos por los muñecos que la cuentan.

Agregó que los más jóvenes y adultos la disfrutan por igual, porque encuentran en temáticas que son de interés, como la justicia.

Luego de una primera temporada en abril y mayo, la Compañía Nacional de Teatro (CNT) vuelve a mostrar 20.000 leguas de viaje submarino, adaptación de la novela de Julio Verne.

Según Gladys Alzate, directora de la CNT, la obra finalizó su temporada con sala casi llena en sus funciones. A su juicio, la clave es que la historia del capitán Nemo se cuenta de una forma muy mágica, con el uso cámara de video y proyecciones de imágenes submarinas, entre otros recursos.

“Originalmente, la directora propuso que la obra fuera para niños de siete años en adelante, pero descubrimos que el montaje convoca desde público de cinco años hasta jóvenes”, agregó Alzate.

Además, se verá con Anancy, la araña teje cuentos, del grupo Teatro Giratablas. Para estas presentaciones en el Educarte, innovaron con la inclusión de un grupo de calipso en vivo, con el fin de darles mayor realce a los cuentos de animales de la selva en el Caribe, que contienen muchos valores para compartir.

Marianela Protti, del grupo Giratablas, explicó que la música, interpretada por el grupo de Ulises Grant, busca integrar aún más a los niños durante las funciones.

“Hay niños que, en medio del espectáculo, bailan. Tenemos un recuerdo de una función en el Hospital de Niños, donde incluso unos niños muy enfermos se entusiasmaron y estaban moviéndose con nosotros”, recordó Protti.

Finalmente participará Génesis Teatro Ensamble y su obra El ogrito. Esta producción busca transmitir valores importantes como la perseverancia.

Invitados. Por celebrar 10 años de actividad, los organizadores del festival se plantearon ofrecerle a su público propuestas de otros países. Para lograrlo recibieron el apoyo económico del Fondo Iberoamericano de Apoyo a las Artes Escénicas (Iberescena).

Es así como este año, los asistentes al festival verán a la agrupación ecuatoriana La Rana Sabia. Ellos tienen 38 años de trayectoria, tiempo en el cual han recorrido infinidad de países, como Argentina, Brasil, Bolivia, Cuba, España, Italia, Francia, Dinamarca, Suecia, Finlandia y Grecia.

En esta visita al país, el grupo presentará su obra Los hijos del viento, que es la historia de cuatro pastores de los Andes.

Desde Guatemala estarán compartiendo con los niños tres grupos: la Compañía Chúmbala Cachúmbala, con su obra El monstruo de la basura; La Charada Teatro y su producción BreVarios; finalmente, el grupo Teatro y Títeres Armadillo, con su creación Ixquic y el árbol de la vida.

Finalmente, habrá representación de México, pues participará Brujerías de Papel, compañía que compartirá dos espectáculos: Historias del color de la tierra y Momentos de oro de Alicia. La primera está dirigida a un público menor de 10 años, mientras que la segunda está pensada para los jóvenes.

En San José, las sedes de Educarte son el Centro Cultural de España, el Teatro de La Aduana, la sala Juan Enrique Acuña y el paraninfo de la Universidad Estatal a Distancia.

Kembly Aguilar, productora general del festival, explicó que, al igual que en ediciones anteriores, trabajaron fuerte con comunidades organizadas para que el teatro llegue a distintos rincones del país.

Hay personas organizadas en Nicoya, Talamanca y Palmares, entre otros lugares, para que sus niños disfruten estos montajes.

Aguilar agregó que hay comunidades en las que los pequeños nunca han visto en vivo un espectáculo de teatro de marionetas, por lo cual la labor de Educarte se balancear las oportunidades que tienen con respecto a las posibilidades que hay en la capital.

Como ocurre desde su creación, quienes trabajan en la realización del festival Educarte quieren demostrar con argumentos que el teatro infantil, hecho con títeres o actores, es una propuesta seria, profesional y de mucha responsabilidad.

“En muchos espacios, el teatro para niños y jóvenes es visto de manera aficionada; no se considera teatro auténtico, creen que siempre tiene que ser gratis y que no es un oficio”, agregó Aguilar.

Aprender. Además de entretener, un festival como Educarte es una ocasión para que los padres saquen provecho del arte, como ayuda en la formación de sus hijos.

“El teatro sensibiliza al niño, le ayuda a desarrollar sus capacidades de comunicación, hace que se expresen con mayor libertad”, aseguró Melvin Méndez.

Al igual que él, Alzate considera al arte teatral como una herramienta importante para el aprendizaje. En su experiencia, esta especialista sabe que este tipo de teatro le ayuda al menor entender estructuras sociales, al igual que a identificar problemáticas y sus consecuencias.

“El teatro permite al niño aprender a visualizar problemáticas y aprender con herramientas cómo resolverlas”, afirmó la directora de la CNT.

Marianela Protti explicó que exponerse a este tipo de arte permite a los chicos desenvolverse mejor dentro de la sociedad, porque aprenden valores y derechos de una forma lúdica.

Para Anabel Méndez, psicopedagoga con especialidad en problemas del aprendizaje, el teatro se puede transformar en una ayuda importante para que los menores aprendan o reafirmen temas como valores y comportamiento social, porque son las edades en que son más receptivos y sensibles.

Para esta especialista del centro de formación y atención Construyendo el Éxito, uno de los puntos por los cuales se facilita el aprendizaje mediante el teatro, es porque los niños aprenden más rápidamente por lo que ven, que lo que escuchan.