Con una gala llena de sonrisas, quijongos y selfis, ayer el Ministerio de Cultura entregó los premios a los mejores artistas del país en el 2014.
Con el Teatro Nacional como escenario, una lluvia de aplausos recibió a cada uno de los protagonistas de esta edición de los Premios Nacionales, máximos galardones que se otorgan anualmente a los artistas más destacados en las artes visuales, música, teatro, danza y literatura, así como a investigadores en historia y otros campos.
El festejo se inició con la voz de Íride Martínez, Premio Nacional de Música a la mejor cantante. Vestida de azul, Martínez interpretó la agudísima aria “ La reina de la noche”, de la ópera La flauta mágica, de Mozart.
Más tarde, subieron al escenario los ganadores de los premios de teatro, entre los que destacó la actriz Tatiana Chaves, por su camiseta que decía: “Derechos laborales ya”.
Acto seguido ascendieron, muy ágilmente y sin pausas, otros premiados en música y danza, así como los elegidos con los Premios Aquileo J. Echeverría en artes visuales, composición musical, novela, cuento, poesía, historia, ensayo, libro no ubicable y dramaturgia.
Todos los premiados en letras desfilaron y recibieron estatuillas por su labor en la comunicación cultural y el periodismo. Posteriormente, la bailarina Estefanía Dondi encantó a la audiencia con movimientos.
Más galardones. El profesor Fernando Solano Ortega fue muy aplaudido por una gran barra de alumnos de una escuela rural marginal; ellos aprendieron a ejercitar su mente con lecciones de ajedrez. Solano obtuvo el Premio al Mérito Civil.
Sin embargo, la ovación llegó de la mano de Eulalio Guadamuz Guadamuz e Isidoro Guadamuz de la O, quienes, junto a jóvenes de la Etapa Básica de Música de Santa Cruz, ejecutaron ritmos guanacastecos.
El presidente de la República, Luis Guillermo Solís Rivera, y su esposa, Mercedes Peñas, así como la ministra de Cultura y Juventud a. i. , Sylvie Durán Salvatierra, presentes en la ceremonia, terminaron también premiados con el cariño de los Guadamuz, quienes decidieron regalarles sus propios instrumentos musicales como gesto de agradecimiento.
En este apartado de la ceremonia, se hizo un homenaje póstumo a Ismael González Lázaro, Premio de Cultura Popular Tradicional 2001.
Finalmente, subió al estrado el más destacado de la noche: Miguel Ángel Quesada Pacheco, de 59 años, Premio Magón 2014. “Agradezco al Gobierno no por darme este premio, sino porque a través de este galardón se reconoce a tantas personas que se preocupan por nuestra riqueza lingüística”, dijo Quesada.
El doctor en Lingüística y profesor en Lenguas Extranjeras de la Universidad de Bergen, Noruega, fue premiado por estudios en dos vertientes: el español de Costa Rica y América Central, y lenguas indígenas costarricenses.
“Ustedes se encuentran aquí por una única razón”, dijo la ministra a.i. , volteando la vista hacia los ganadores. “Los hombres y mujeres de este país sabemos que este es un lugar mejor gracias a todas las variables de la cultura que nos enriquecen”.
El presidente Solís cerró la gala con una disculpa y otra promesa. “El malogrado FIA nos afectó a todos, pero las circunstancias pueden cambiar. Me comprometo a que, con mi trabajo y el de mi equipo de profesionales, esto no vuelva a pasar y el año entrante tengamos el espectáculo que el FIA y los costarricenses merecen”, concluyó .