Este es el videojuego del que todos están hablando en las redes sociales. Basta con meterse a Twitter y buscar Player Unknown’s Battlegrounds ( PUBGS ) para ver todas las reacciones, memes , gifs y comentarios que genera este título, que salió al mercado en marzo de este año.
Este juego fue lanzado en acceso anticipado, es decir, aún sigue en desarrollo (y quizá nunca deje de estarlo); sin embargo, ha logrado vender más de ocho millones de copias en cuestión de meses, casi el triple de lo que ha vendido la consola Nintendo Switch, que se estrenó también en marzo.
En páginas de Twitch y YouTube, Players Unknown Battlegrounds domina gran parte de la conversación de los videojugadores, como los famosos youtubers , que se graban y comentan en medio de sus partidas.
En el momento que usted esté leyendo este artículo 850.000 jugadores estarán dándose a los tiros en los robustos servidores de este videojuego.
Según datos de la aplicación Steam Spy en una semana los videos de PUBGS pueden tener ocho millones de reproducciones, superando–y por goleada– a las visualizaciones que tiene Grand Theft Auto V , uno de los gigantes en la industria del entretenimiento electrónico.
Este juego fue creado por un Dj irlandés deprimido, Brendan Greene, que encontró refugio en los videojuegos de guerra y en la novela japonesa Battle Royale , cuya influencia se ve reflejada en la popular saga de novelas y películas Juegos del Hambre .
Y eso es PUBGS , los Juegos del Hambre pero sin arcos ni romances en cuevas. Eso sí, hay pólvora y plomo para todos.
¿De qué trata el juego? La primera vez que probé este videojuego no tenía la mínima idea de lo que enfrentaba. Me arrojaron a mí y a otros 99 jugadores a una isla desierta. El terreno del juego es un campo abierto, con casas, bosques, bases militares, granjas, calles y vehículos.
El objetivo es simple: ser el único superviviente, el método lo escoge uno.
Después de aterrizar el marcador de la esquina superior derecha disminuyó de 100 a 99. Al instante apareció un mensaje que decía “Lobito29 mató a Vendetttttttta con un puñetazo”.
En los próximos segundos el marcador bajó a 90 y se escuchaban disparos a lo lejos.
Mi único acercamiento al género de disparos fue con Doom 2, que salió en 1994; por lo tanto, decidí que la mejor estrategia para ganar era ocultarse en una granja y esperar a que todo terminara.
Lo que ignoraba era que a medida que el tiempo corre el mapa es rodeado por una especie de pared eléctrica que obliga a los jugadores a acercarse entre ellos. Esta mecánica existe para evitar que los participantes hicieran campamentos o adoptaran la vida de granjero pacifista, así que me vi obligado a abandonar mi refugio.
Mientras salía de la propiedad vi como un jugador era acribillado por una pareja de personajes que ya tenían cascos, chalecos antibalas y fusiles de alto impacto.
Me escabullí de milagro y el el conteo de jugadores aún con vida marcaba 50. Solo faltaba la mitad, no tenía armas y el mapa se hacía a un más pequeño.
Cuando el marcador indicaba que solo quedaban 20 jugadores, mi personaje seguía con vida y lo había hecho sin disparar una sola bala. Parecía que lo iba a lograr y hasta había encontrado en una casa abandonada; adentro hallé un casco de soldado y un arma poco convencional, un sartén de hierro.
Lastimosamente, en una de mis escaramuzas me encontré con la muerte de frente: él conducía un vehículo a toda velocidad, creo que ni me vio– definitivamente yo no lo hice hasta que me pasó por encima–.
Ahí terminó todo. No hay vidas extras, ni médico que me trajera de regreso del mundo de los muertos o un lugar mágico para resucitar como Counter Strike o Overwatch . No hubo nada, solamente se acabó y volví a la pantalla de inicio.
Mi personaje con un sartén de hierro había muerto para siempre. Fue brutalmente real.
Así culminó mi primera experiencia en PUBGS . Este videojuego no destaca por su gráficos: la animación remiten a un juego de PlayStation 2, solo tiene un mapa y se le reportan varios fallos o bugs (aunque no experimenté ninguno durante la semana que lo probé).
Sin embargo es altamente adictivo. Es una competencia brutal que toma lo mejor excelentes simulaciones de disparos como ARMA y DayZ .
Para llegar al podio se debe echar mano de alianzas, estrategias y de recursos limitados. No es un título para principiantes, pero es satisfactorio a largo plazo. PUBGS está lejos de ser perfecto. No obstante, es una experiencia que acelera el pulso.
El jugador desconocido. Brendan Greene es el responsable de este terremoto que conmociona a la subcultura del gaming . Este irlandés Dj de 41 años es conocido en el mundo virtual como PlayerUnknown.
Greene no es como los demás desarrolladores de videojuegos: nunca ha tocado un cartucho de The Legend of Zelda y tiene estudios en diseño gráfico.
La historia de PUBS arranca en la recta final final de la tercera década de Greene, cuando enfrentaba el divorcio y el desempleo. No era un momento sencillo, pero el irlandés halló consuelo en los juegos ARMA II y DayZ . Así se percató de que quería plasmar su propia visión en un título por computadora.
A pesar de saber solamente lo básico en diseño de videojuegos se aventuró a crear un modificación al software del videojuego ARMA II . Esta modificación se estrenó en el 2013, se llamó Battle Royale y rápidamente ganó popularidad. Dos años después Greene fue contactado por el estudio de videojuegos surcoreano Blue Hole, Inc., que estuvo interesado en contratar al irlandés para que dirigiera su propio videojuego.
Greene quiso cambiar la percepción que tienen la mayoría de videojuegos de disparos modernos, en los que los jugadores tienen vidas infinitas y un avatar es apenas un modelo desechable que carga un fusil.
“Toda esta concepción de tener vidas infinitas me aburre. Ya sabés de dónde vienen los malos y todo se resume en pegar un balazo; sin embargo, en mi videojuego usted nunca sabe qué es lo que va a suceder, ahí yace la clave” aseguró el programador irlandés en una entrevista al la revista Rolling Stone .
Greene ahora vive en Corea del Sur y junto a un equipo de ocho programadores trabaja en expandir PUBGS , su fantasía que tomó por sorpresa a la industrial del videojuego.