El Festival de Cine de Berlín empezó el jueves con tres ticos moviéndose en sus entrañas: Laura Astorga, como jurado de la sección paralela Generation ; el cineasta Iván Porras, como miembro del Talent Campus, y la productora, Karolina Hernández, pescando socios en el European Film Market.
Con la premier mundial de The Grand Budapest Hotel – nuevo filme de Wes Anderson –, se inauguró la competencia oficial del certamen y Astorga estuvo presente como invitada especial en la función. Ella es la primera tica en fungir como jurado en la Berlinale.
Una butaca del imponente Berlinale Palast, con el nombre de Astorga, anunció la presencia de un corazón tico en medio de uno de los certámenes cinematográficos más importantes del mundo.
Estar allí es todo un privilegio, pues Astorga compartió la sala con personalidades como Willem Dafoe, Owen Wilson y Tilda Swinton, miembros del elenco de la película.
Además, la cineasta se topó con productores internacionales no precisamente conocidos, pero que según Astorga le podrían traer buenos réditos a su carrera.
“Los stars (encuentros con estrellas) casi nunca son muy útiles para nuestro cine... Es decir, es gente simpática y amable y suelen ser encantadores porque son actores y el encanto es su especialidad”, dijo Astorga desde Berlín.
“Pero lo que importa son los contactos profesionales para eventuales coproducciones y colaboraciones. Esos son gente de un perfil muy bajo... A ninguno de esos personajes se le distingue por ser famoso”, agregó la cineasta, directora de la cinta Princesas rojas .
Ayer viernes, Astorga se preparaba para a iniciar su primer día de trabajo, como jurado oficial de la sección Generation.
Talento. Por su parte, Iván Porras, director del largometraje en proyecto El baile y el salón , se encuentra en la Berlinale con dos claros objetivos: nutrirse con las charlas y talleres del Talent Campus y encontrar socios para su película.
El Talent Campus es un encuentro de jóvenes promesas, que la Berlinale selecciona cada año. Porras es el único tico presente en la edición 2014.
Además, Porras participa en el Script Station , una asesoría personalizada de guión, en la que solo se aceptan 10 proyectos por año.
Por si fuera poco y aprovechando su presencia en la Berlinale, Porras se inscribió en European Film Market de la Berlinale, trinchera desde donde ofrece su película a importantes productores del medio.
En esa tarea le ayuda Karolina Hernández –productora de El baile y el salón – quien en días pasados estuvo en Holanda participando en una asesoría para productores en el Rotterdam Lab , del Festival de Cine de Róterdam.
“Decidimos inscribirnos al European Film Market, ya que estamos buscando socios coproductores de Alemania, Francia y Holanda”, explicó Hernández.
“Acá tenés acceso a contactos de todas las personas que están en el mercado. Nos toca investigar quiénes son y si tienen el perfil que estamos buscando para El baile y el salón ”, agregó.
El baile y el salón – filme se estrenaría en el 2015– contará la historia de Eugenio, un hombre que no ganó nada como futbolista pero que a los 72 años decide reinventarse y triunfar en la pista de baile.