Roma (AFP). El productor Dino De Laurentiis, que hizo posible numerosas grandes obras del cine italiano, entre ellas La Strada y Noches de Cabiria , de Federico Fellini, murió en Los Angeles, a los 91 años de edad, informó el jueves la prensa italiana.
Nacido el 8 de agosto de 1919 en Torre Annunziata, cerca de Nápoles, Agostino De Laurentiis, apodado Dino, fue un productor prolífico en cuya filmografía figuran tanto películas de gran espectáculo, como Guerra y Paz y La Biblia , como obras de autor.
Residía en Estados Unidos desde los años 70, cuando quebró su compañía productora italiana Dinocitta.
Empezó su carrera con sólo 20 años, convirtiéndose en uno de los puntales del renacimiento cultural italiano de la posguerra y del neorrealismo.
En los años 50, trabajó con los más grandes directores italianos, produciendo, además de obras de Fellini, Arroz amargo de Giuseppe de Santis, películas de Roberto Rosselini, Eduardo de Filippo y Mario Monicelli.
En su filmografía figura asimismo El huevo de la serpiente (1977) del maestro sueco Ingmar Bergman.
En Estados Unidos produjo Tres días del Cóndor de Sydney Lumet con Robert Redford, el remake de King Kong dirigido por John Guillermin en 1979, El Bounty de Roger Donaldson con Mel Gibson en 1984, y Hannibal de Ridley Scott en 2001, entre otras.
Dino de Laurentiis se casó en 1957 con la bella Silvana Mangano, de quien se divorció en 1988, un año antes de la muerte de la actriz.
Considerado una leyenda del cine, produjo o coprodujo más de 500 filmes, de los cuales 38 fueron nominados o ganadores de Oscar, entre ellos La Strada de Fellini.
En el 2001 recibió en Los Angeles el premio Irving Thalberg por el conjunto de su carrera y por su creatividad como productor y la alta calidad de su cine.
“El cine pierde a uno de sus grandes viejos”, reconoció el exalcalde de Roma, Walter Veltroni, conocido cinéfilo, quien elogió su capacidad de producir cine de autor (Fellini, De Sica, Monicelli, Comencini, Petri, Soldati, Scola) y cintas taquilleras.
Hijo de fabricantes de pastas, se inscribió muy joven en el Centro Experimental de Cine de Roma con el deseo de convertirse en actor, pero rápidamente decidió producir filmes.
El primero fue L'Ultimo combattimento de Piero Ballerini, seguido de L'amore canta , con el que alcanzó un discreto éxito.
Trabajó a menudo en cooperación con el productor Carlo Ponti, marido de Sophia Loren, despertando la curiosidad de la prensa mundial ya que los dos estaban casados con las divas del momento.
Con Mangano, el gran amor de su vida, a la que descubrió cuando produjo uno de sus mayores éxitos, Arroz Amargo , tuvo cuatro hijos.
En los años 50 apoyó a realizadores como Roberto Rossellini, padre del neorrealismo italiano y al gran Eduardo de Filippo; produjo filmes aclamados como La gran guerra de Mario Monicelli, con Alberto Sordi y Vittorio Gassman (León de Oro en Venecia en 1959).
En la década siguiente construyó sus estudios cinematográficos, los cuales quebraron posteriormente, aunque siguió produciendo películas, mucho más comerciales.
Tras radicarse en Estados Unidos al inicio de los 70, De Laurentiis produjo verdaderos éxitos como Barbarella , Conan el bárbaro a la vez que producía míticos filmes de autor como Los tres días del Cóndor o Blue Velvet de David Lynch.
En los últimos años, De Laurentiis prefería producir adaptaciones de libros exitosos y gracias a su buen ojo alcanzó un notable éxito con el personaje de Hannibal Lecter, con Hannibal Rising (2007) y Red Dragon , un remake de Manhunter , del 2002.
El célebre productor se casó por tercera vez con la exuberante rubia Martha Schumacher, también productora, con la que tuvo dos hijas.
Con ocasión de sus noventa años en el 2009, De Laurentiis, verdadero “padre-padrone” del cine, reunió en Estados Unidos a toda su tribu, entre ellos al sobrino Aurelio, quien le sigue en Italia los pasos.