El drama shakespereano de un grupo de prisioneros de máxima seguridad de la cárcel de Rebibbia, en las afueras de Roma, impactó al público nacional.
La pasión por el arte mostrada en pantalla por los reclusos fue tan bien recibida por los cinéfilos que César debe morir , la cinta de los hermanos Paolo y Vittorio Taviani, llega ahora al circuito comercial de Nova Cinemas, al mismo tiempo que regresa a la cartelera del cine Magaly.
Fabiola Armas, asistente de Mercadeo de la Distribuidora Romaly, comentó que esta película –estrenada en julio en el Festival de Cine Europeo – fue una de las más aclamadas en la encuesta publicada en la cuenta de Facebook del cine Magaly.
Por ese motivo, al finalizar el festival, estuvo por segunda vez en las carteleras de esa sala de cine. Sin embargo, la extensión en las funciones fue insuficiente para complacer a quienes se quedaron con las ganas de ver este filme.
César debe morir es una adaptación teatral de la obra dramática Julio César , escrita por William Shakespeare, interpretada por los convictos dentro de una cárcel, quienes descubren que, entre ellos, existen las mismas relaciones de poder de la obra que interpretan.
“Cuando conocí el arte, esta celda se me convirtió en prisión”, asevera uno de los privados de libertad, un parlamento que condensa la esencia del filme.
Para el crítico de cine Wílliam Venegas, “ César debe morir es cine renovado”, pues muestra una gran fuerza en la lógica del drama y, pese a situarse dentro de una cruda locación, “aflora un cálido tono poético para acercarse a un universo excepcional de seres humanos”.