Para muchos fanáticos e incluso para al mismo John Wagner –creador de Dredd–, la cinta Judge Dredd (1995) provoca muy malos recuerdos.
La predecesora de Dredd 3D en la pantalla grande hace que la siguiente frase sea de uso común: “Mae, ojalá que esta sea mejor, porque la del 95 nada que ver”.
Protagonizada por Sylvester Stallone y dirigida por Danny Cannon, la película fue muy mal recibida por la crítica internacional y, según el padre de la historieta, traicionó parte importante del estilo particular del héroe.
“La película, al final, parece empeñada en destruirse a sí misma”, dijo con severidad Owen Gleiberman, crítico de la revista Entertainment Weekly . En ese entonces, el 85% de las críticas del sitio Rotten Tomatoes le dio malos puntajes; de hecho, tuvo un promedio de 4 puntos entre 10 posibles.
Para colmo de males, por su papel en la cinta, Stallone fue nominado al premio Golden Raspberry, de 1995, como el peor actor del año.
Como si no fuera suficiente, Wagner le achacó que su trama quiso abarcar mucho y terminó mostrando muy poco. También, el escritor criticó que en la cinta del 1995 Dredd mostró su rostro, algo que, según Wagner, nunca debió suceder.
Queriendo alejarse de los errores de la cinta predecesora y, marcando un terreno diferenciado, el mismo actor Karl Urban –que encarna a Dredd en la nueva cinta– salió en defensa de la identidad secreta del personaje.
“Uno de los mejores aspectos de Dredd es que nunca conoces totalmente su identidad. Desde su creación en 1977, ha sido la representación sin rostro de la ley, un enigma, y hacer cualquier otra cosa no habría sido Dredd”, dijo el actor en las notas de producción de la nueva película.
A pesar de todo, Judge Dredd recaudó $113 millones en la taquilla mundial, no tan mala considerando que la cinta hizo un presupuesto de producción de $90 millones.
De Dredd 3D se espera mucho, pero mucho más. La crítica le dio su visto bueno y el mismo creador del cómic la impulsó con su bendición. Al menos en Inglaterra, el filme ya dio sus primeros réditos, pues en su primer fin de semana en cartelera recaudó $1,6 millones, el máximo monto para una cinta de adultos desde el 2010.