Con el fin de promover el modelaje costarricense tanto a nivel nacional como internacional, nació la Asociación Nacional de Modelaje (ANM).
Con el apoyo y la colaboración de instituciones públicas como el Ministerio de Educación (MEP), El Patronato Nacional de la Infancia (PANI) y el Instituto para las Mujeres (Inamu), la ANM realiza diferentes actividades para ayudar a aquellos que deseen profesionalizarse en este ámbito y, además, brinda ayuda social a las personas que han tomado un camino equivocado escondido tras la mampara del modelaje.
De acuerdo con Yesenia Bermúdez, modelo y representante de la ANM, desde hace aproximadamente dos años la asociación trabaja para generar un estilo de vida ético y profesional del modelaje.
La asociación funciona como un ente promotor y regulador de la profesión por medio de la formación y capacitación constante de las personas interesadas en incursionar en la industria.
“Los mejores países como España, Francia, México y Colombia trabajan con asociaciones de modelaje. Lo que quisimos fue crear una organización que sirviera como punto de balance entre las academias y los modelos en Costa Rica”, dijo.
Su trabajo, entre muchas otras cosas, consiste en dar asesorías legales a sus asociados, charlas sobre nutrición y cursos.
También se encargan de ser un contacto entre las agencias de modelos y los profesionales para conseguir trabajos y ayudar a que los contratos sean cumplidos.
“Muchas veces pasa que en un contrato dicen una cosa y a la hora de hacerlos valer cuesta que se cumplan; por esta razón tenemos la ayuda de un abogado”, aseguró la representante.
Los asociados tienen derecho a utilizar los servicios de un nutricionista, el abogado, un entrenador personal y asistir a las clases que brinda la asociación.
“Todos los sábados tenemos los cursos: a las 11 a. m. es el turno para niños de 4 años en adelante; a partir de las 2 p. m. es especial para personas mayores de 15 años”, explicó Bermúdez.
Las clases se imparten en el Outlet Mall en San Pedro.
Ayuda social. La ANM también tiene un fin social y es darles ayuda y asesoría a aquellas personas que han caído en el mal camino disfrazado de modelaje.
“Ayudamos a aquellos que están en la prostitución, por ejemplo, o a las personas que son engañadas por proxenetas para abusar de ellos tanto física como psicológicamente”, comentó.
Para este trabajo tienen la ayuda de una psicóloga del Inamu que brinda charlas a los afectados.
“Todo el mundo quiere darse a conocer y por la falta de valores, el dinero fácil, las drogas y el alcohol, algunos se desvían del camino correcto”, explicó la modelo.
La idea de la ANM es limpiar la imagen que tiene el modelaje en el mercado y afianzar la parte positiva de ver esta profesión como un trabajo bien remunerado y alejado de la explotación sexual y la trata de personas.