San José.
Hay quienes desde que conocieron a sus parejas no volvieron a tocar el suelo. Su roce les estremece la catedral del corazón y las horas juntos se van como si fueran segundos. A estos amores el Día de los Enamorados les sobra. A otros, en cambio, la fecha les sirve para avivar la llama e interpretar tres de las costumbres típicas del 14 de febrero: irse a cenar, regalar flores y dejar el corazón sobre el papel.
Así lo expresa un estudio de la empresa Unimer Centroamérica que indagó las costumbres típicas y percepciones de los costarricenses frente al Día de los Enamorados. El estudio consistió en 226 entrevistas a ticos del Gran Área Metropolitana (GAM) con acceso a Internet y edades entre 18 y 54 años. Las consultas se hicieron entre el 6 y 8 de febrero. El análisis posee un 6.5% de margen de error y 95% de confianza.
Pese a la pestilencia comercial que impregna a la fecha, la consulta afirma que 63% de cibernautas abraza la celebración saliendo a comer con sus parejas o entregando obsequios. Según el Censo Nacional del 2011, ese año la población que había en el GAM de 18 a 54 años equivalía a 621.832 personas. Esto hace suponer a Unimer que unas 71.500 parejas saldrán mañana a cenar. También es altamente probable que mañana estos amores se inunden de papel.
Las cartas románticas o mensajes amorosos siguen tan vigentes como la tragedia de Romeo y Julieta de William Shakespeare pues 79% de entrevistados admite haber acudido al recurso escrito como flecha para cazar a su pareja. Son "ellos" (en comparación a "ellas") quienes más ejecutan acrobacias románticas para conseguir el favor de sus amores ya sea llevando serenata, regalando flores o arrodillándose al pedir ser admitidos como parejas.
Curiosamente, indica Unimer, solo 26% juzga romántico ponerle a su amor sobrenombre o diminutivo estilo "osita", "flaquito", pollita, "gordo", "negrita" y otros dignos de antología por su proverbial uso.
Los regalos de siempre. Fuera de cenar, que es visto como regalo, a los enamorados criollos se les agotaron las ideas de regalo. La circularidad de los obsequios es clara. El 49% regala perfumes o colonias, 49% ropa y flores y chocolates 36%. Sin embargo, salir a cenar solos (89%), escribir cartas de amor (79%) y llevar flores (88%) son las muestras más frecuentes.
Nadie mencionó, por ejemplo, ocuparse todo el mes lavando los platos y liberar de ello a la pareja, o largas sesiones por semana de masajes en la cama u otros detalles tan personales como gratuitos que podrían cualquier día del calendario decir "te quiero" sin proferir esas dos palabras. De hecho, muchos lectores de nacion.com en Facebook alzan el hacha contra esta celebración que vuelve el sentimiento una mercancía comercial.
"Comercio.. comercio... comercio... si no fuera por el comercio, la fecha pasaría desapercibida.... tontería... el amor y la amistad se deben manifestar todos los días....!" escribió esta mañana José M. Lizano. Mientras Karin Omar Alcerro afirma que: "es preferible el viernes 13!!!". Otros lectores, en cambio, tienen sus propios matices sobre el 14 de febrero.
"La verdad es puro comercio pero siempre me dejo envolver soy muy detallista y nunca me detengo a pensar en cuánto invierto, total a las personas a quienes les regalo son importantes en mi vida (hijas,pareja) y se merecen eso y más!", anotó Jessi Hernández.
"Personalmente me agrada la celebraciòn de este dìa para consentir a aquellas personas a las que realmente amo aunque sea con una galletita o un chocolate, sin embargo muchas personas confunden el Amor y solo se dejean llevar por la propaganda y el comercio. No se dan cuenta que el verdadero amor se demuestra todos los días", terció Bella Aguilar.
Quien también dibujó una línea de equilibrio con el día de mañana fue Ángela MG quien escribió: "no tengo nada en contra de esa fecha. Muchos la critican por ser meramente comercial, lo cual es cierto, pero también es una fecha que muchas parejas aprovechan para uno que otro detalle. Es como el día del trabajador, del agricultor, o de la secretaria; se sabe que todos los días se debe honrar, pero hay una fecha específica para celebrarlo más especialmente. No tengo pareja, no lo voy a celebrar, pero no mando a la hoguera a quien quiera hacerlo".