El Tiempo, Colombia. gda. Los usuarios de WhatsApp enfrentan una nueva amenaza. Se trata de una técnica llamada Ingeniería Social, que consiste en robar dinero e información.
Cibercriminales están usando estrategias para convertir al usuario no solo en víctima, sino también en cómplice de la propagación de las estafas.
Eset, empresa de seguridad informática, concluyó que las campañas de infección usan como gancho mensajes que ofrecen bonos de descuento de reconocidas marcas.
Dichos premios en realidad son una trampa para que el usuario se suscriba (sin saberlo) a paquetes de sms premium que generan costos adicionales en la factura telefónica.
“Los atacantes escogen tiendas que nunca antes habían sido utilizadas para cometer delitos; así evitan ser detectados”, afirmó Lucas Paus, especialista en seguridad informática de Eset.
Las marcas usadas para las estafas son Zara, Starbucks, McDonald’s, KFC y Walmart.
Los estafadores aprovechan la popularidad y cantidad de usuarios de WhatsApp para engañar. Ellos consideran que esta plataforma es propicia para propagar virus sin costos adicionales.
Los cibercriminales usan mensajes con plantillas similares en todas las estafas, pero las personalizan según los logos y colores de cada marca. Se expanden con el modelo de encuesta según la dirección IP del visitante. La IP informa al atacante sobre el país y el idioma de la víctima.
En Colombia, por ejemplo, circula una estafa que ofrece 500.000 pesos en las tiendas Zara. Para ello, se envía un mensaje que solicita ir a un enlace en donde el usuario debe llenar una encuesta para hacer efectivo el supuesto descuento.
Al completar el formulario, es necesario compartir el enlace con 10 contactos de WhatsApp. Así, los delincuentes no le dan tiempo al usuario para que reflexione sobre lo que hace.
Las estafas cambian automáticamente el idioma y el tipo de moneda según el país.
Ante esta amenaza, expertos piden no seguir enlaces engañosos que lleguen por WhatsApp ni dar información personal.