Para el ministro de Ciencia y Tecnología, Alejandro Cruz, la brecha digital no solo es odiosa y limitante para el desarrollo de las personas, sino que también refleja la brecha de ingreso y social que se marca al comparar distintas zonas de Costa Rica, la cual también se debe combatir.
Para enfrentarla, el Gobierno trabaja actualmente con varios proyectos. Al que más energía le está dedicando Cruz es a los Centros Comunitarios Inteligentes (Cecis), laboratorios de cómputo de acceso público.
Óscar Quesada, coordinador del proyecto, dijo que ya existen 250. La gran meta para el final de esta administración son 500. Para ello se requieren $30 millones, recursos que vendrían del Fondo Nacional de Telecomunicaciones (Fonatel) pero aún se ignora cuándo llegarán.
Mientras tanto, Quesada tiene que trabajar con apenas ¢10 millones de presupuesto para este año, en el cual espera abrir cerca de 15 nuevos Cecis.
“Sin los recursos de Fonatel, será imposible llegar a la meta de los 500 Cecis”, afirmó Cruz.
Quesada explicó que se está poniendo especial atención a los cursos y capacitaciones que se les ofrece a quienes usan los Cecis.
Según ambos funcionarios, la falta de educación podría justificar, en parte, por qué el Estado invierte en centros de cómputo, pero, aun así, la brecha digital no se reduce.
Sin embargo, la administración Chinchilla, según anunció en su Acuerdo Social Digital, también apostará por el desarrollo de un Plan Nacional de Banda Ancha, cuya meta es que el 10% de los ticos tengan una conexión a Internet simétrica (igual velocidad de subida que de bajada) de 2 Mbps en el 2015.
Esta estrategia también incluye la dotación de servicios en línea en las instituciones públicas, desarrollo de contenidos y capacitación en el uso productivo de tecnologías digitales. Para concretarla se necesitan $306 millones, 70% aportado por el sector privado y el 30% por el Estado.
Otro punto que destacó Cruz es que a los centros de educación pública del país se les está dotando de computadoras y conexión a Internet, algo que también puede ayudar a bajar la brecha.