EscucharEsterillos Oeste, Parrita. La muerte de dos personas, en menos de dos semanas, en playa Esterillos Oeste encendió la luz de alarma entre lugareños de esa localidad del cantón de Parrita, Puntarenas.
Los vecinos están preocupados porque, mientras en el 2012 solamente hubo dos personas ahogadas, ya la cifra fue igualada en el primer mes de este año.
Rose Mary Chamberlain, vecina, expresó que Esterillos Oeste es una de las playas más visitadas del Pacífico central; no obstante, aún no se ha logrado establecer un grupo de salvavidas que puedan brindar el servicio de vigilancia.
“Es un verdadero paraíso. Sin embargo, no es una piscina, hay personas que han perdido la vida aquí”,dijo Chamberlain.
Según datos proporcionados por la Cruz Roja de Parrita, en Esterillos Oeste hay al menos 10 proyectos entre hoteles, cabinas, apartamentos y casas de alquiler. Es una playa con poco más de seis kilómetros de longitud.
Carlos Carrillo, quien hace las funciones de salvavidas allí gracias a la ayuda de algunos empresarios, resaltó que no todo se debe solo a la falta de vigilancia en la playa, sino también a que algunos turistas le tienen poco respeto al mar.
Ambos vecinos coincidieron en que la falta de apoyo de la empresa privada y del Estado hace que muy pocas personas quieran integrarse al grupo de salvavidas que pretenden formar para vigilar esa playa.
Dos tragedias. El más reciente accidente acuático fue la muerte de Michael McKinsckly, de 65 años, un abogado estadounidense que llegó al país, procedente de Colorado, para unas vacaciones.
Él estaba nadando con una tabla boogie , junto con unos amigos, la mañana el 21 de enero, cuando una ola lo revolcó y se ahogó.
El otro caso registrado en lo que va de este año fue la muerte de Rodrigo Rodríguez Jiménez, de 60 años, vecino de la zona, quien falleció el 13 de enero cuando se bañaba y una corriente lo arrastró.
Francisco Pérez, de la Cruz Roja de Parrita, manifestó que el factor que más dificulta la atención de las emergencias en el sector es la distancia desde esa ciudad.
“Son 47 kilómetros aproximadamente, de 15 a 20 minutos es lo que se dura en llegar al lugar. Esos minutos son la diferencia entre la vida y la muerte”, declaró el socorrista.
Carlos Salas, de la Fuerza Pública, comentó que Esterillos siempre ha sido una playa peligrosa.
“Hay muchos rótulos en inglés y español para que los turistas y visitantes nacionales estén bien advertidos e informados. Sin embargo, siempre ocurren este tipo de desgracias”, añadió.
