Cuatro días después de que el reo Roberto Maya Rosales diera una entrevista a un periodista de La Nación , para denunciar que fue víctima de una requisa anal por parte de la Policía Penitenciaria, un grupo de custodios de Máxima Seguridad de La Reforma le propinó un paliza.
Así consta en un recurso de hábeas corpus, declarado con lugar por la Sala Constitucional, el 27 de agosto del 2013, en el que condenaron al Ministerio de Justicia por los hechos suscitados el 18 de agosto de ese mismo año.
Ese recurso fue uno de los 30 casos estudiados por la magistrada Nancy Hernández en el voto N.° 2014-7274, el cual se publicó el miércoles anterior. Allí se concluye que en ese ámbito de Máxima Seguridad existe un “patrón sistemático de tratos crueles, degradantes e inhumanos y abuso policial”.
Por eso, ordenaron a la ministra de Justicia, Cristina Ramírez, intervenir la sección y proponer un plan remedial en tres meses.
Los magistrados tuvieron por probado que el 18 de agosto del 2013, hacia las 5:30 p. m., los reos Roberto Maya y Henry Marín fueron agredidos físicamente por oficiales de seguridad que ingresaron a la celda, donde estaban estas personas.
De hecho, existe un dictamen forense el cual concluyó que los dos reos presentaban contusiones simples (equimosis y excoriaciones) compatibles con el mecanismo de trauma narrado en la historia médico-legal. Estas lesiones, según el médico, son del tipo que sanan sin dejar secuelas y dictaminó una incapacidad de seis días.
“Los mismos policías que me habían hecho la requisa anal, ingresaron a la celda a hacer un recuento y empezaron a reclamarnos sobre lo acusado ante La Nación . Esto generó que se calentara el ambiente, nos pasaron al patio, nos esposaron, nos golpearon y nos gasearon. Esa ropa se presentó como prueba ante la Medicatura Forense y la Fiscalía”, relató Maya, quien en diciembre fue trasladado al ámbito de Mediana Cerrada por orden de un juez de ejecución.
Aunque los efectivos denunciados negaron esos hechos ante la Sala Constitucional, para los magistrados el dictamen médico refuta estos argumentos y demuestra que los reclusos sí sufrieron contusiones, por lo que declararon con lugar el recurso, al señalar que en la tutela de los derechos constitucionales, en caso de que existan dudas, se favorece a la víctima.
Llamada de atención. La Sala advirtió al Ministerio de Justicia de que en el caso del reo Roberto Maya ya era la tercera vez que debían tutelarle sus derechos por las agresiones de las que ha sido víctima y recordaron un caso del 2008 y la requisa anal que sufrió en el 2013.
“Es relevante hacer notar que esta es, por lo menos, la tercera vez que el tutelado Maya es víctima del uso de fuerza desproporcionada por parte de funcionarios del C.A.I. La Reforma, por lo que las autoridades recurridas deberán darle seguimiento a este caso y prevenir que los funcionarios de este centro penal incurran nuevamente en estos actos y que si procedieren de modo contrario cometerán el delito previsto y penado en el artículo 71 de la Ley de la Jurisdicción Constitucional”, dice el voto.
La Sala informó sobre esta golpiza a la Fiscalía para que investigara. De hecho, Roberto Maya dijo que una jueza ordenó a los oficiales que le hicieron la requisa anal y luego lo golpearon , no acercarse al ámbito D, donde él se encuentra, pero asegura que ellos incumplen la medida.