Un total de 98 personas requirieron hospitalización para recuperarse de lesiones graves, provocadas por los ataques de perros el año pasado en nuestro país, informó la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS).
De acuerdo con el área de Estadísticas de la Salud de la institución, los niños entre uno y los cuatro años fueron los principales afectados.
De los 98 casos, 63 fueron hombres y 35 mujeres. De estos, los niños registran 26 casos entre los uno y cuatro años; 15 casos de los 5 a los 9 años y 10 casos entre los 10 a los 14 años.
Las niñas registran 9 casos entre uno y cuatro años y 9 entre los 5 a los 9 años.
Las lesiones de alto riesgo se localizan en cuello, cara o cabeza y las de bajo riesgo en extremidades, abdomen o espalda.
Augusto Espinoza, médico de la sección de Emergencias del Hospital Tony Facio de Limón, manifestó que las heridas superficiales se tratan y el paciente puede recuperarse en la casa, pero se hospitalizan cuando las heridas son profundas y extensas, según la misiva.
Espinoza agregó que han visto niños con heridas profundas, de 15 centímetros de extensión que van desde la frente hasta la parte de atrás de la cabeza, así como también lesiones en el rostro y el cuello, las cuales comprometen la vida.
Bien Librado. El último ataque de un perro hacia un niño se registró el pasado 24 de febrero en Mollejones de Coyolar de Orotina, luego de que una perra pastor belga llamada ‘Soe’ mordió a un pequeño de cinco años.
Producto del ataque, el niño terminó con 18 colmillazos y mordiscos en el párpado del ojo derecho, la cabeza y la espalda.
Esa noche fue remitido en condición delicada al Hospital Monseñor Sanabria de Puntarenas, donde fue dado de alta a la mañana siguiente.
Para evitar algún nuevo incidente, los propietarios trasladaron a la perra hasta una veterinaria, donde se encargaron de ubicarla en un lugar indicado y donde no hayan menores.