Las condiciones ventosas que prevalecen en diversos puntos del país siguen generando alertas por caída de árboles y objetos. La Compañía Nacional de Fuerza y Luz (CNFL) atendió ayer lunes 167 averías y hoy a las 4 p. m. llevaban 28.
Así lo confirmó Fructuoso Garrido, director de distribución de esa entidad. El jerarca afirmó que las zonas más afectadas son Coronado, San José de la Montaña y Barva de Heredia.
En San Juan de Tibás, el rótulo del restaurante de comidas rápidas McDonald's cedió ante la fuerza de los vientos y dichosamente solo provocó daños materiales. La estructura cayó sobre un techado externo del local.
Según Garrido, la mayoría de las llamadas son por cortes de luz; pero no se tratan de averías, ya que son situaciones en que el sistema eléctrico se autoprotege y se desconecta. Las cuadrillas solo reubican los portafusibles y el servicio se reestablece.
Hoy martes hubo que cambiar tres postes en Santa Ana, en Birrí de Heredia y en Paso Llano en Barva. La caída de árboles sobre el tendido provocó el colapso y dejó sin electricidad a los vecinos de esas zonas.
Las siete cuadrillas que trabajan las 24 horas en el área metropolitana han tenido que ser reforzadas con otras de sucursales, por lo que doce cuadrillas atienden las constantes llamadas por cortes de electricidad y afectación en postes.
Por su parte el Instituto Costarricense de Electricidad (ICE) tenía registradas 392 averías en redes de distribución eléctrica en San José, Pavas, Escazú, Ciudad Colón, Puriscal, Vásquez de Coronado, Barva de Heredia, Upala, Los Chiles, Guatuso, Bagaces, Tilarán y Cañas. Además reportan la caída de ocho postes.
Adicionalmente, las condiciones adversas han provocado la caída de árboles en los cables eléctricos en las comunidades caribeñas de Bataán y Ticabán. El ICE ha contabilizado más de ¢34 millones en la atención de estos eventos naturales.
Entre los incidentes más relevantes están la caída de ramas sobre líneas de distribución en el sector de Villa Mongalva en Pavas, un poste quebrado en Paso Llano, y otro en Birrí.
En Alajuela los vientos pusieron a correr a muchos, incluso a los cuerpos de emergencia por caída de cables eléctricos, rótulos y portones.
En el parque Juan Santamaría, uno de los dos regalos gigantes de la decoración navideña que instaló la municipalidad de Alajuela cayó esta mañana por acción de los fuertes vientos.
Unos 200 metros al sur del cementerio habían portones en media calle.
Meteorológico dice que ráfagas seguirán. Debido a la afectación de un sistema de alta presión en el Golfo de México, las ráfagas máximas han oscilado entre 60 y 80 kilómetros por hora en las partes bajas del Valle Central y el Pacífico norte.
En los sectores montañosos, los vientos oscilan entre 90 y 120 kilómetros por hora en las montalas del Valle Central y Tilarán. Según la Comisión Nacional de Emergencias hubo crecidas el río Banano y el río Sixaola en Telire.
Se prevé que las condiciones de aceleración de vientos alisios persistan al menos hasta este miércoles. Hacia el fin de semana habrá una disminución paulatina, por ello se favorecerá la presencia de temperaturas frescas en el Valle Central.
Habrá lluvias entre débiles y moderadas e intermitentes en la provincia de Limón y la zona norte. También sucederá lo mismo que en los sectores montañosos del norte del Valle Central.
El resto del país tendrá condiciones predominantemente despejadas.
El IMN insiste en mantener la vigilancia ante la posible caída de objetos y pide precaución al sector aeronáutico.
Llaman a evitar quemas de todo tipo ya que las mismas pueden salirse de control.