Buenos Aires Un menor de 16 años que portaba una carabina fue arrestado anteayer por la Fuerza Pública como sospechoso de cuidar una plantación de 1.000 matas de marihuana.
La aprehensión la efectuaron ocho policías, quienes caminaron tres horas en medio de la montaña para llegar a una finca en la localidad de Salitre, situada 15 kilómetros al sureste del centro de Buenos Aires.
Durante el recorrido, los oficiales pasaron por zonas agrestes y de difícil acceso, luego de que recibieron información confidencial sobre el plantío.
Según las autoridades, una vez que el menor notó la presencia policial amenazó con dispararles a los oficiales con una carabina que contenía 10 tiros.
Pese a que, al principio, el cuidador se negó a entregarse, lo hizo una vez que los policías le gritaron que eran mayoría.
La finca pertenece a un familiar del joven y, en el pasado, oficiales habían visitado el lugar por hechos similares. En apariencia, este cuidaba la propiedad desde hacía varios días y fue liberado horas después.
El menor permanecía dentro de un pequeño rancho fabricado con cañas de bambú y láminas viejas de zinc. Allí los oficiales encontraron insumos varios para la siembra de marihuana.
Guillermo Barquero, oficial de la Fuerza Pública encargado del operativo, manifestó que se destruyeron más de 1.000 matas, las cuales tenían una altura de entre 40 centímetros y 1,5 metros.
“En esa zona, la Fuerza Pública suele realizar operativos constantes. Las matas fueron arrancadas y quemadas la misma noche”, aseveró Barquero.