El exguerrillero colombiano Libardo Parra, requerido por su país para que cumpla una sentencia por secuestro, fue deportado ayer hacia Panamá.
La directora de Migración, Kathya Rodríguez, comunicó que Parra fue expulsado del país luego de que, el 28 de agosto, el Tribunal Administrativo Migratorio le denegó por cuarta vez una solicitud de refugio.
Rodríguez confirmó en la noche de ayer que Parra fue entregado en la frontera a las autoridades migratorias panameñas, luego de que ese país aceptó recibirlo.
No obstante, al mismo tiempo, el canal 2 de la televisión panameña divulgó declaraciones del jefe del Servicio Nacional de Fronteras de Panamá (Senafront), Frank Abrego, en las que aseguró que el foráneo fue detenido para ser entregado a Colombia.
“Fue ubicado en uno de los locales comerciales de Paso Canoas Entendemos que iba de paso, ya que las autoridades costarricenses le habían suspendido el refugio” , manifestó el jefe policial al canal de televisión.
Sobre esto, Kathya Rodríguez indicó: “Desconozco lo que digan allá. Nuestra función era (hacer) que él no permaneciera en Costa Rica. No podíamos enviarlo a Colombia y se buscó a un tercer país. Las autoridades de Panamá serán quienes determinen qué hacer con él”, dijo la jerarca de Migración.
El colombiano no podía ser extraditado a su país tras una resolución del Tribunal Penal de San Ramón del 2011 que señaló que Parra fue enjuiciado en su ausencia y que eso es contradictorio con la legislación costarricense.
Ante eso, Costa Rica había buscado que otro país lo recibiera, pero Nicaragua, El Salvador, Ecuador, Venezuela y Guatemala se negaron a aceptarlo.
La Nación consultó ayer por la tarde a la Cancillería de Panamá, la cual , por medio de su oficina de Relaciones Públicas, respondió que no tenía información ni comentarios que brindar sobre este caso.
Entre tanto, el Servicio Nacional de Migración del país vecino indicó que tampoco tenía información al respecto.
Parra fue llevado a la zona sur ayer, pasado el mediodía, en un avión del Ministerio de Seguridad.
¿Quién es? El nombre de Libardo Parra empezó a escucharse en Costa Rica el 15 de marzo del 2006 cuando se le detuvo en Escazú, pues existía una orden de captura internacional girada por Colombia. En ese país se le condenó en su ausencia a 24 años de prisión por un secuestro ocurrido en 1995.
Colombia le atribuyó ser comandante del grupo guerrillero Movimiento 19 de Abril (M-19).
El extranjero empezó a vivir en Costa Rica en el 2004, tras ingresar como turista. Cuando fue detenido, su visa estaba vencida por lo que tenía una condición ilegal.
Además, en ese momento las autoridades le decomisaron $1,4 millones en efectivo (¢700 millones), por lo cual el Ministerio Público lo acusó del delito de legitimación de capitales y fue condenado en setiembre del 2007 a seis años y ocho meses de prisión.
Luego de que cumpliera la pena, el Tribunal de Penal de San Ramón, en Alajuela, advirtió de la imposibilidad de enviarlo a Colombia, a menos que ese país le garantizara un nuevo juicio.
Parra quedó en manos de la Dirección de Migración, que lo mantuvo en el Centro de Aprehensión para Extranjeros en Tránsito durante 16 meses, hasta que, el 25 de mayo del 2011, la Sala IV ordenó ponerlo en libertad.
Desde entonces, el extranjero debía firmar periódicamente.
Según indicó Rodríguez, este martes Parra debía presentarse a firmar y no lo hizo.