Ni la Municipalidad local ni el Ministerio de Salud aceptaron ayer tener algún grado de responsabilidad en la matanza de decenas de palomas en el parque de Guadalupe de Goicoechea.
El hallazgo se dio a eso de las 6 a. m. por transeúntes, quienes publicaron fotos de los restos de los animales en las redes sociales, como muestra de su repudio.
Aparentemente, las aves fueron envenenadas.
En las redes sociales, muchos usuarios pidieron explicaciones a las autoridades, tras conocer que el Ministerio de Salud había ordenado en julio del 2012 a la Municipalidad la eliminación sistemática de las palomas del parque.
Niegan responsabilidades. Rossana García, jerarca de la Dirección del Área Rectora de Salud de Goicoechea, confirmó la orden dictada el año anterior; sin embargo, aseguró que el Ministerio de Salud no tuvo ninguna participación en el hecho.
“Nosotros ordenamos a la Municipalidad la eliminación de las palomas de Castilla del parque, pero en ningún momento les dijimos cómo debían hacerlo, eso deben coordinarlo con el Servicio Nacional de Salud Animal (Senasa) y el Sistema Nacional de Conservación (Sinac)”, alegó García.
La doctora explicó, además, que la decisión pretende proteger la salud de la población, debido a que las palomas transmiten gran cantidad de enfermedades.
Por su parte, la Municipalidad de Goicoechea negó toda responsabilidad en la matanza e informó de que iniciará una investigación para dar con los responsables.
Hernán Luna, director de Gestión Ambiental del Ayuntamiento, manifestó que la situación los tomó por sorpresa.
También dijo que ayer realizaron una limpieza “profunda” en el parque, para evitar que residuos del supuesto veneno utilizado afecten a los ciudadanos.
Regulación. Luna aseguró que actualmente el Gobierno local coordina con Senasa y con el Sinac para aplicar un plan de control de reproducción de las aves.
Añadió que la próxima semana solicitarán al Ministerio de Salud un permiso para alimentar a las palomas con maíz y nicarbazin (derivado de hígado de pollo), componente que reduce en gran medida la fertilidad de los huevos de las palomas.
De aprobarse el programa y obtenerse un resultado positivo, podría darse una disminución considerable de estas aves.