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La sección de Fraudes del OIJ allanó la Clínica de Coronado para secuestrar expedientes relacionados con las presuntas estafas. | JORGE NAVARRO (Jorge Navarro)
Dos médicos fueron capturados como sospechosos de inventar enfermedades terminales del hígado a pacientes con el fin de estafarlos.
La sección de Fraudes del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) los detuvo este jueves en San Isidro de Heredia, cuando salían de sus viviendas.
Los aprehendidos son un radiólogo de apellido Baltodano, de 55 años de edad, y su cuñada, de apellido Monestel, de 40 años.
La Policía Judicial les atribuye al menos nueve estafas.
Engaño. De acuerdo con las autoridades, Baltodano laboró para la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) en la clínica de Vázquez de Coronado hasta mayo del 2012.
Según la investigación que realizó el OIJ, durante los cinco meses de ese año el médico diagnosticó a varios pacientes en la clínica con la enfermedad de hígado graso en fase terminal, cuando en realidad no tenían ese padecimiento.
Posteriormente, les decía que la única cura posible era con medicina natural y los remitía al consultorio privado de su cuñada, quien, supuestamente, desarrollaba ese tipo de atención. Aparentemente, la mujer los examinaba y les confirmaba el dictamen falso.
“Presuntamente, luego de que revisaba a los pacientes, la sospechosa les indicaba que debían seguir presentándose a consultas mensuales con ella por al menos un año y les recetaba gran cantidad de medicinas naturales que, al parecer, causaron efectos secundarios en los ofendidos”, comunicó el OIJ.
Las autoridades indicaron que los pacientes pagaban ¢20.000 por cada cita.
Los afectados se enteraban de la estafa cuando buscaban la opinión de otro médico, quien descartaba que estuviesen enfermos.
Además, otros ofendidos se percataron del engaño luego de publicaciones en un medio de comunicación, según indicó el OIJ.
Ambos sospechosos fueron apresados ayer a las 7 a. m. y puestos a las órdenes de la Fiscalía.
El OIJ realizó allanamientos en la clínica de San Isidro de Coronado y en otros centros privados ubicados en Moravia y Desamparados, donde, al parecer, se realizaron algunas de las estafas.
Los agentes secuestraron documentos relacionados con los casos.
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El médico de apellido Baltodano fue detenido alrededor de las 7 a. m., cuando salía de su vivienda, en San Isidro de Heredia. | OIJ PARA LN
Señalados. Marino Ramírez, presidente del Colegio de Médicos y Cirujanos, comunicó que tanto Baltonado como Monestel afrontaban causas en la fiscalía de esa corporación por faltas al código de ética.
En el caso de Baltodano, el Colegio recibió 10 denuncias, de las cuales se desestimaron cinco y las otras fueron a los tribunales internos; no obstante, en dos de esas últimas los pacientes conciliaron, y dos no se presentaron. Una está en espera de audiencia.
En el caso de Monestel, se le abrieron tres causas disciplinarias. En dos casos los afectados conciliaron y la otra irá a audiencia.
Por su parte, la oficina de prensa de la CCSS informó de que Baltodano renunció a la función pública a partir del 21 de mayo del 2012 sin pago de prestaciones.
La entidad agregó que el médico no registraba faltas disciplinarias.
María Eugenia Villalta, gerente médica de la CCSS, detalló que “la clínica de Coronado llamó a todos los pacientes afectados para efectuarles una valoración médica y pruebas de laboratorio y se descartó el supuesto problema de salud; sin embargo, dos de ellos fueron remitidos al Hospital Calderón Guardia por otros padecimientos”.
La funcionaria dijo que más del 90% de los afectados en estos casos asistieron a la atención ofrecida.
