Cinco oficiales de Fuerza Pública, de edades comprendidas entre los 21 y 34 años, fueron detenidos la mañana de este viernes por agentes del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) de Alajuela como sospechosos de incumplimiento de deberes y otros delitos.
La detención se realizó es su lugar de trabajo en el centro del cantón central.
Según el informe preliminar del OIJ, los hechos por los que se detuvo a dichos oficiales se dieron entre las 10:30 p. m. de ayer jueves y las 5 a.m. de hoy viernes.
Todo inició luego de que una mujer fue asaltada en Villa Hermosa de Alajuela. Un oficial de seguridad privada que se encontraba cerca logró detener al presunto asaltante y dieron aviso a la Fuerza Pública.
Presuntamente los oficiales se presentaron en el lugar, se hicieron cargo del detenido y lo trasladaron a la delegación de Montecillos, mientras que a la ofendida le indicaron que fuera a la Comandancia del centro de Alajuela a formular la denuncia, por lo que ella procedió.
Un funcionario de la Fuerza Pública, en apariencia, llamó al Ministerio Público e informó a la Fiscal que lo atendió que tenían un sujeto detenido.
El sospechoso del asalto al parecer le dijo al oficial a cargo que necesitaba ir al baño. Aparentemente, este lo sacó de la celda y lo dejó ir al baño, hecho que aprovechó el sospechoso para escaparse.
Cuando la Fiscal devolvió la llamada al funcionario de la Fuerza Pública para realizar los trámites judiciales, éste supuestamente le dijo que la ofendida se había retirado y que no quiso firmar el parte policial por lo ocurrido.
La Fiscal notó algo extraño y le solicitó a los agentes judiciales que investigaran lo sucedido, por lo que estos se presentaron a la Comandancia y hablaron con los oficiales de la Fuerza Pública que atendieron el incidente, quienes supuestamente indicaron la misma versión de que la ofendida no quiso denunciar.
Los agentes judiciales hablaron con el oficial de seguridad privada que detuvo al sospechoso del asalto y también lograron dar con la dirección de la residencia de la ofendida. Al consultarle lo sucedido, ella les indicó que no puso la denuncia porque, en apariencia, los oficiales de la Fuerza Pública que atendieron el caso la persuadieron para que no lo hiciera, al parecer para ocultar la fuga del presunto asaltante.
Una vez realizadas las diligencias de investigación, la Fiscal ordenó la detención de los oficiales que atendieron el caso. Los investigadores se presentaron a la sede de la Fuerza Pública de Montecillos y ahí detuvieron a los sospechosos y decomisaron los libros de novedades.
Los detenidos son dos oficiales de apellidos González, uno apellidado Barrantes, otro de apellido Arroyo y una mujer de apellido León. Los cinco fueron pasados con un informe al Ministerio Público para que se les determine su situación jurídica.