Limón. El ingeniero municipal de Limón, Óscar Felipe León Wing Ching, diseñó y elaboró los planos, y luego supervisó la construcción de un predio en Río Madre de Liverpool de Limón, obra a la que luego, como funcionario público, le concedió el permiso de construcción.
Ese hecho, que se dio entre el 2006 y el 2008, fue objeto de una investigación de la Procuraduría de la Ética Pública, que en marzo del 2012, señaló que el funcionario incurrió en una posible infracción “a los principios de imparcialidad y transparencia en el ejercicio de la función pública” y ordenó un proceso disciplinario.
En el documento, firmado por la procuradora Lissy Dorado Vargas, se señala que aunque León no esté en el régimen de dedicación exclusiva, “como funcionario debe cumplir deberes y obligaciones de carácter ético y (...) proteger la institución a la que sirve”.
La Procuraduría constató que León recibiría ¢8 millones por realizar la obra privada que tenía un valor de ¢101 millones.
“Me extraña que la prensa esté enterada de este caso porque, incluso a nosotros nos han negado el reporte de la Procuraduría”, respondió León cuando La Nación lo consultó sobre el tema. Mientras, su abogado defensor, José María Pereira, desacreditó el reporte de la Procuraduría de la Ética. “Es solo papel, el caso aún no está cerrado y no puedo darle detalles de la estrategia que vamos a seguir”, manifestó.
Sanción. Por este caso, la Municipalidad de Limón le impuso una suspensión de 15 días sin goce de salario al ingeniero León, quien ocupa el cargo de jefe del Departamento de Dirección Técnica y Estudios de la institución. La sanción consta en un documento firmado el 21 de febrero por la vicealcaldesa de ese municipio, Cynthia Small.
La medida se aplicó desde el 22 de febrero, según comunicó el ayuntamiento.
Actualmente, León está disfrutando de un periodo de vacaciones.
La vicealcaldesa manifestó que la acción disciplinaria es una respuesta a la petición que les hizo la Procuraduría de la Ética.
“Se impone esta medida porque la persona investigada no tiene otros antecedentes dentro de la Municipalidad”, indicó Small.
La subjefa consideró que el ayuntamiento debe plantearse la posibilidad de pagar exclusividad profesional a sus funcionarios para evitar que hechos similares ocurran en el futuro.
Entre tanto, Gustavo Chaves, encargado del Departamento Legal de la municipalidad de Limón, confirmó que el ingeniero no tiene otras investigaciones pendientes en la institución.
Chaves detalló que León labora en el ayuntamiento desde el 11 de agosto del 2005.
Denuncia. La Procuraduría de la Ética inició la pesquisa de este caso desde el 2 de enero del 2012, luego de que recibieron una denuncia anónima. El quejoso comunicó que León realizó trabajos a la empresa Soluciones Integrales Limonenses (Solilsa), y que luego, como jefe de un departamento municipal, aprobó y supervisó la obra.
La Procuraduría comprobó que los trabajos mencionados en la denuncia arrancaron el 12 de julio del 2006 cuando León, como ingeniero municipal, autorizó la construcción de una caseta, la colocación de malla y otras obras para un predio en un terreno de 68.000 metros cuadrados en Río Madre.
El 9 de mayo del 2008, León otorgó un permiso temporal para el patio, y el 23 de mayo de ese mismo año, autorizó el movimiento de tierras, según consta en el estudio.
La Procuraduría apuntó a que el ingeniero “en el ejercicio de su profesión liberal, no puede asesorar o dirigir un proyecto que debe ser conocido y aprobado por la municipalidad para la cual labora”.