Limón. Un estudiante del Colegio Técnico Profesional de Limón, quien portaba una pistola calibre 9 milímetros, disparó ayer contra dos supuestos exalumnos que intentaron llevárselo, confirmó la Fuerza Pública.
El insólito hecho se registró a la 1:45 p. m. en las cercanías del taller de Artes Industriales de la institución, situado en barrio Corales.
Como sospechosos de la retención figuran dos exalumnos de entre 25 y 27 años, quienes ingresaron al centro educativo luego de asegurarle al guarda apostado en el portón principal que se dirigían hacia la dirección, con la intención de efectuar algunos trámites.
Supuesto motivo. Carlos Hernández, quien se estrenaba ayer como director de ese colegio limonense, manifestó que los dos hombres que ingresaron le arrebataron una cadena de oro al estudiante, por lo que este se devolvió hasta un aula a buscar el arma.
“El colegial, de apellido Sinclair y de 18 años, fue abordado mientras permanecía en el taller de Artes Industriales con otros compañeros. Al parecer, este tenía el arma en otro lado y luego se defendió a balazos. Se va a proceder de manera inmediata con la expulsión del estudiante, quien es problemático”, manifestó Hernández.
Agregó que los sospechosos quedaron grabados en una cámara que apunta hacia el portón principal del centro, cuyos videos fueron entregados a la Policía Judicial y la Fuerza Pública.
Al colegio asisten al menos 1.500 estudiantes en un solo turno.
George Piu, guarda del colegio desde hace 12 años, contó que como los hombres eran conocidos de vista no los apuntó en el libro de actas que manejan en la entrada.
“Ambos dijeron que venían a pedir unos certificados de títulos. Luego observé que traían a un estudiante agarrado del cuello. Durante el forcejeo el estudiante sacó un arma de entre sus ropas y les disparó, sin lograr impactarlos. Los hombres lograron huir corriendo por el portón peatonal que se sitúa en la entrada al parqueo y da a la calle”, detalló Piu.
Una vez afuera, los sospechosos escaparon a bordo de un automóvil blanco que los esperaba, mientras el estudiante huyó en otro, del cual no se dieron detalles.
Carros baleados. Como resultado de la balacera, dos vehículos que estaban en el estacionamiento fueron dañados en las puertas.
Se trata de un automóvil Suzuki Celerio de modelo reciente y un Chevrolet Spark, propiedad de dos profesores de la institución, cuyas identidades no fueron reveladas.
En el parqueo se hallaron tres casquillos, confirmó la Policía.
El 18 de julio del 2011, Juan Pablo Salazar Calderón (18), estudiante de duodécimo año del Colegio Técnico Profesional Ricardo Castro Beer, en Orotina, fue asesinado de un balazo mientras recibía clases en el laboratorio de cómputo.
El sospechoso del ataque contra el alumno fue un joven de 17 años, quien se disparó en la cabeza luego de matar a Salazar. El homicida murió un día después.