El alcalde de Limón, Néstor Mattis Williams, alegó que en este país “se le juzga y se le condena sin prueba alguna por ser afrodescendiente”.
El comentario lo hizo público el viernes anterior en su cuenta de Facebook, al tiempo que atribuyó “a la prensa y a la Asamblea Legislativa dañar la imagen del alcalde del cantón de Limón”, quien en febrero próximo aspira a ser reelecto por el Partido Auténtico Limonense.
Aunque no lo menciona, la opinión de Mattis es en respuesta al acuerdo de la Comisión Especial de Seguridad y Narcotráfico del Congreso, que pidió fuera separado del puesto de alcalde. Esa solicitud la sustentaron en que fue “omiso en la vigilancia de la zona marítimo-terrestre en relación con la existencia de construcciones ilegales en zona pública” en bahía Portete, donde se levantó un complejo portuario sin permisos y en el cual se captura una lancha con 318 kilos de marihuana.
Irrespetado. Néstor Mattis comentó que cuando lo citan a la comisión legislativa es “solo para ser irrespetado y acusado de casos con argumentos que no reflejan la realidad de los hechos, por ser un afrodescendiente que no agacha su cabeza, como lo exigen algunos en este país y por haberme atrevido a demostrar que se puede lograr una administración eficiente y transparente en este cantón central de Limón”.
Agregó: “Hago formal denuncia pública a nivel nacional así como a nivel internacional de esta persecución a la que se ha sometido a los ciudadanos pertenecientes a las minorías por no seguir el libreto establecido por una mayoría étnica que desea seguir pisoteando los derechos humanos en este país”.
Mattis argumentó que la persecución no es de ahora, sino que comenzó en el 2011, cuando, luego de ser electo alcalde, se le denegó el permiso para congelar la plaza que tenía en Japdeva y lo obligaron a renunciar. “Esto planificado y ejecutado por la entonces Junta Directiva y presidente ejecutivo de Japdeva, así como Casa Presidencial” afirmó.
El alcalde afirmó que hace esta denuncia pues no puede seguir escondiendo tal realidad.