No ha pasado ni un mes desde que una noticia publicada en el diario El Universal de México reveló que Costa Rica es un punto reconocido mundialmente para el tráfico de órganos.
Esa publicación, del 27 de mayo, levantó una voz de alerta entre autoridades médicas y judiciales, aunque, para ese momento, se indicó que no existía ninguna investigación en curso.
En el reportaje, el corresponsal José Meléndez relató que dos israelíes habían pagado $6.000 a un costarricense y a un nicaraguense por recibir un trasplante de riñón en una clínica privada.
Además, la noticia señalaba que en el país había todo un negocio de trata de personas con fines de explotación para el tráfico de órganos, encubierto por supuesto turismo de trasplante y de turismo médico.
La información dada a conocer por El Universa l fue revelada en un conversatorio sobre la trata de personas realizado el 24 de abril en Costa Rica en el que participaron funcionarios de los poderes Ejecutivo y Judicial, según el diario.
Días después, el Ministerio de Salud informó de que había presentado una denuncia ante la Fiscalía el 28 de mayo por un supuesto tráfico de órganos. Este martes, tras la detención de una banda, las autoridades no detallaron si se trata del mismo caso denunciado previamente.
La presidenta Laura Chinchilla resaltó el trabajo hecho por la Policía.
“Hemos sentado un precedente (...). Hoy vemos un caso más, que es el del tráfico de órganos y no estamos dispuestos a que quede en la impunidad el tema de crimen organizado”, prometió la mandataria.