El Tribunal Penal de San Carlos condenó a ocho años de cárcel al padrastro de dos menores contra quienes, según determinaron los jueces, cometió abusos sexuales agravados.
La sentencia fue dictada en junio, pero quedó en firme y fue notificada el mes pasado, según confirmó la oficina de prensa del Poder Judicial.
El sentenciado es el nicaragüense José Angel Ponce, a quien se condenó por seis delitos de abuso sexual agravado en contra de las menores y de una cuñada de 16 años, quien lo denunció.
El hombre fue detenido en el cantón de Upala, Alajuela, el martes 12 de mayo del 2015 y se le acusó de tocar en las partes íntimas a dos hijastras, de 8 y 11 años, y a su cuñada.
Ponce, quien estaba indocumentado en nuestro país, quedó tras las rejas dos días después de su captura, ya que el Juzgado le dictó tres meses de prisión preventiva como medida cautelar, mientras se le investigaba por los abusos sexuales a menores.
En la reciente condena el juez Luis Calderón presidió el proceso judicial.
De acuerdo con la indagación de la Fiscalía, los abusos ocurrían tres años antes de la captura, pero aumentaron cuando el sujeto se fue a vivir con la madre de las dos niñas, en enero del 2015.
La investigación se inició luego de que una cuñada del individuo presentó la denuncia ante los agentes del Organismo de Investigación Judicial (OIJ).
Cuando Ponce se enteró de que le seguían la pista, intentó escapar a Nicaragua, sin embargo la Policía fue alertada y lo capturó en la vivienda en la que residía, en San José de Upala.
Tras la detención, la hijastra de ocho años y la cuñada decidieron contar lo sucedido.
La niña, de 11 años, se abstuvo de denunciar, según comunicó la Fiscalía cuando se detuvo al extranjero.
Natalie Segura, fiscala encargada del caso, explicó luego de la captura que el sospechoso viaja con frecuencia entre Costa Rica y Nicaragua.
Ponce llegó a Costa Rica en el 2012 y laboraba como peón agrícola. Empezó a convivir con una tía de las dos menores, pero ella sospechó que era un abusador y se separó de él.
Posteriormente, el hombre inició una relación sentimental con la hermana de su expareja, quien es la madre de las menores de ocho y 11 años.
“Los abusos los cometía en la casa, cuando quedaba a solas con las niñas”, según la acusación. Ponce descontó prisión preventiva en la cárcel de La Marina.