Cinco hombres y una mujer, integrantes de la banda Los Diablos, que opera en Pavas, fueron condenados este martes a 90 años de prisión (la pena se reduce a 50 años para cada uno) por matar a dos hombres e intentar asesinar a otro.
Para que el Tribunal de Juicio de Pavas emitiera esa sentencia resultó clave el testimonio del sobreviviente, pues identificó a los sospechosos y narró, en un anticipo jurisdiccional de prueba, cómo sucedió el caso.
El hombre salvó su vida cuando saltó desde una altura de unos 40 metros, de un acantilado, pero quedó parapléjico.
Esa decisión la tomó después de que los acusados mataron a José Clemente Rodríguez Muñoz, de un balazo en la nuca, y a Jeferson Miranda Cruz. A ambos los lanzaron por el acantilado. Los muertos y el superviviente, de apellido Polonio, fueron localizados el 17 de abril del 2015, en el llamado tajo de Los Diablos en Pavas, San José.
En este caso, los sentenciados son Nelson Andrés y Alberto Jesús Luna Segura; Fernando Esteban Jiménez Segura, así como Deibi Juan, Edwin Jesús y María Alejandra, los tres de apellidos Barquero Segura.
Razonamiento. El Tribunal de Juicio de Pavas, integrado por Tatiana Murillo, Cinthya Angulo y Emilia Fallas (quien presidió), en una muy breve explicación, dijo que dictó la condena porque en el debate –que se inició la segunda semana de abril– se aportaron suficientes pruebas testimoniales y documentales para acreditar la acusación del Ministerio Público.
"El Tribunal considera que el hecho ha sido demostrado (...). Estamos ante tres delitos de homicidio, uno en grado de tentativa. Los imputados han actuado de manera segura, bajo condiciones que ellos mismos establecieron, dejando a los ofendidos en total situación de indefensión", dijo la jueza Emilia Fallas.
Agregó que dieron total credibilidad a la primera declaración de Polonio, que brindó pocos días después de ocurrido el suceso y en la cual señaló quiénes eran los responsables.
"Conforme pasó el tiempo, esta víctima, en estado de vulnerabilidad, ha sido presionada por personas indeterminadas en este proceso para que cambie su versión, a cambio muchas veces de un ofrecimiento de dinero", dijo.
Por el contrario, el abogado Leonel Villalobos, defensor de Alejandra Barquero, dijo que no hubo pruebas para condenar "salvo la primera declaración del ofendido que luego varió en múltiples ocasiones a lo largo del proceso". El penalista agregó: "Hay informes y elementos que acreditan que fue otro grupo de personas las que cometieron estos hechos y no los aquí sentenciados".
El móvil de estos homicidios, según las pesquisas del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), fue la pugna por territorios para la venta de drogas que tenían, en la zona de Pavas, Los Diablos y la banda de Pollo, a la que pertenecían las víctimas.