San Ramón, Alajuela. Ernesto Hidalgo Villalobos, de 25 años, se quedará por tiempo indefinido en el Hospital Nacional Psiquiátrico por matar a puñaladas a su abuelo, de 85 años, el 5 de mayo del año pasado mientras sufría una crisis causada por drogas.
Así lo ordenaron ayer los jueces José Alejandro Pérez, Édgar Rodríguez y Graciela Blanco, del Tribunal Penal de San Ramón, al concluir el juicio por la muerte de Carlos Hidalgo Quesada.
Los juzgadores concluyeron que, al momento de cometer el delito, el nieto se encontraba bajo los efectos de la marihuana, pero además padecía de una psicosis.
Por esa situación, pese a que se constató que hubo un delito de homicidio calificado y la conducta fue antijurídica, al analizar las circunstancias personales del joven, lo declararon inimputable.
Así lo regula el artículo 42 del Código Penal: “Es inimputable quien en el momento de la acción u omisión, no posea la capacidad de comprender el carácter ilícito del hecho o de determinarse de acuerdo con esa comprensión, a causa de enfermedad mental, o de grave perturbación de la conciencia sea ésta o no ocasionada por el empleo accidental o involuntario de bebidas alcohólicas o de sustancias enervantes”.
Durante el proceso se divulgó que, un año antes de atacar a su abuelo, Hidalgo Villalobos estuvo internado en el Psiquiátrico y también tuvo un cuadro de psicosis similar al que presentó cuando sucedió el crimen.
Además, se indicó que ha consumido drogas desde la pubertad, tiene antecedentes delictivos y ya se ha intentado suicidar.
Los análisis de las pruebas señalaron que la ropa y el cuchillo que la Policía le decomisó al nieto, tenían sangre del abuelo.
Familia. Rodrigo Araya, abogado querellante de la familia del fallecido, señaló que ellos avalaron la decisión del tribunal.
“La familia está satisfecha porque se acredita que él mató al abuelo y sobre eso no había duda y con la enfermedad que él tiene era un peligro que anduviera libre”, manifestó Araya.
Dijo que la medida dictada por los jueces se basó en que había un peligro si Hidalgo Villalobos se mantenía en libertad y, por eso, lo recluyeron por tiempo indefinido para que reciba tratamiento. El joven estuvo internado durante el proceso y esa medida se extendió seis meses más, mientras la sentencia queda en firme.