La fiscala de Limón, Yorleny Ching Cubero, encargada de elaborar la acusación en el caso de Jairo Mora, afrontará desde el 9 de febrero un juicio por los delitos de abuso de poder y privación de libertad agravada.
La causa corresponde a una querella presentada por la defensora pública de Siquirres, Lorry Chiny Orozco, a quien Ching ordenó arrestar en el 2010, supuestamente por haber manipulado a un testigo.
La aprehensión ocurrió cuando la defensora salía de un juicio y duró pocos minutos. Según afirmó Chiny después, se dio de forma arbitraria y sin que le explicaran los cargos.
Por ese caso, la Inspección Judicial le impuso a la fiscala una sanción de ocho días sin goce de salario, confirmó la oficina de prensa del Poder Judicial.
La afectada interpuso una denuncia penal. El 21 de setiembre del 2011, la Fiscalía Anticorrupción solicitó un sobreseimiento definitivo, al considerar que “no hubo dolo de privar la libertad de Chiny Orozco”, indicó ayer la oficina de prensa del Ministerio Público.
No obstante, el Juzgado Penal de Hacienda aceptó elevar a juicio la demanda privada. El debate se extenderá hasta el 13 de febrero, en el Tribunal Penal de Goicoechea.
Conocida. El nombre de la fiscala Ching salió a relucir esta semana cuando el Tribunal Penal de Limón absolvió a siete sujetos por el homicidio del ambientalista Jairo Mora. Los jueces criticaron duramente la acusación que la funcionaria presentó y absolvió a los imputados debido a las deficiencias.
La acusación está suscrita por Ching y avalada por Carlo Díaz, actual fiscal adjunto de Heredia. La Nación solicitó entrevistas con los dos, pero la oficina de prensa indicó que no se referirían al asunto.
Ching labora en el Poder Judicial desde 1998. Fue nombrada fiscala auxiliar en el 2000 y en el 2009 llegó a la coordinación de la Fiscalía de Siquirres; luego pasó a fiscala de juicio en Limón.
‘Arbitrario’. La detención de Chiny ocurrió el 24 de junio del 2010, cuando ella defendía a dos acusados de tentativa de homicidio y robo agravado.
Días después, en entrevista con La Nación , la defensora narró que durante su arresto le pidió a la fiscala que le indicara la causa y que esta le respondió “ahora se va a dar cuenta, cuando llegue a la Fiscalía”.
Federico Campos, abogado de Chiny, argumentó esta semana que su representada fue víctima de una “detención ilegal, autoritaria, desproporcionada y contraria al derecho, por orden de una fiscala que se creyó con poderes ilimitados”.
Sobre la decisión del Ministerio Público, de no acusar a Ching ni ser parte del proceso penal, Campos manifestó que le dejaba un “sinsabor”.
“No puedo asegurar nada irregular pero, si a cualquier otro ciudadano, por hechos menos graves y con menos pruebas, lo acusan... Por eso es muy raro que en este caso no se acusara, pues las pruebas sí lo justificaban”, dijo.
Jueces molestos. El pasado 26 de enero, al dictar la absolutoria por el crimen de Mora, la jueza Yolanda Alvarado, en representación del Tribunal, señaló que la pesquisa fue deficiente en la recolección de las pruebas.
Resaltó que no se pudieron utilizar las escuchas telefónicas ni las actas de posesión de las líneas celulares debido a que la Fiscalía de Limón nunca las ofreció como prueba. Asimismo, recalcó que se rompió la cadena de custodia de otra evidencia.
Alvarado agregó que la acusación tenía redacciones “aventuradas” y que no atribuía acciones concretas a cada sospechoso, sino que generalizaba.