(sjimenezr)
El preso Joehl Araya Ramírez, quien apareció muerto el domingo en una celda de máxima seguridad en La Reforma, había denunciado amenazas de muerte y agresiones físicas en un recurso de amparo que presentó, el viernes, ante la Sala IV.
En un documento de tres páginas escrito a mano, el preso pide a los magistrados “frenar lo que está sucediendo, pues los están matando poco a poco”.
El recurso es contra el jefe, supervisores y oficiales del ámbito de Máxima Seguridad del centro penal La Reforma, en San Rafael de Alajuela, pero no menciona los nombres.
Según la página en Internet de la Sala Constitucional, el escrito pasó a estudio del magistrado Gilbert Armijo Sancho.
En todo caso, se informó de que fue interpuesto contra algunos funcionarios de La Reforma, que deberán rendir los informes respectivos cuando sean notificados por la Sala IV.
Asimismo, se comunicó que, en caso de determinarse la “posible participación dolosa o culposa por parte de funcionarios, se aplicarán las medidas disciplinarias”.
Mientras, Jorge Rojas Vargas, director del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), anunció que el documento será incorporado a la investigación que procura aclarar lo sucedido con el intento de fuga de ocho internos, el pasado 11 de mayo, y la muerte del presunto líder de ese plan, Joehl Araya.
Rojas hizo el anuncio durante una conferencia de prensa, en la que además dijo que el resultado de la autopsia sobre la muerte del reo estará concluido a más tardar en unos 15 días.
Inicialmente, aseguró que el 11 de mayo, tras el intento de fuga, “fuimos brutalmente golpeados”, tanto él como otros cuatro reos. Alegó que en esa ocasión quedaron inconscientes debido a la “cantidad de patadas, puñetazos y garrotazos que nos dieron en la cabeza, la cara, costillas, brazos y piernas”.
En el documento citó que, al día siguiente, les volvieron a dar “ una paliza” con la intención de acabar con sus vidas.
Araya argumentó que también lo despojaron de sus pertenencias personales y quebraron un televisor de su propiedad.
El recluso agregó que los custodios les escupían la comida, les echaban el café en la cara y, presuntamente, los amenazaron de muerte.
“Se nos ha amenazado diciéndonos que ya tienen todo planeado para matarnos, pero que primero nos harán sufrir un tiempo más, lo cual en verdad preocupa”, afirmó el reo en el recurso.
Joehl Araya reconoce que “se cometió un error, pero es bien sabido que para ellos existen las autoridades correspondientes, las cuales se encargarán de dar sanción por el error cometido”.