Parrita. Un total de 50 casas inundadas y destechadas, más de 15 árboles caídos sobre carreteras y varias comunidades sin fluido eléctrico, fue el saldo del paso de una tormenta marina que azotó antenoche varias comunidades del cantón de Parrita, Puntarenas.
Freddy Garro, alcalde de Parrita y presidente del Comité Local de Emergencias, explicó que la crisis ocurrió alrededor de las 6 p. m., luego de tres horas de intensas lluvias y fuertes vientos.
Los sitios más afectados fueron Esterillos, así como Bejuco, poblados que permanecieron sin luz toda la noche debido a la caída de tendido eléctrico.
Garro agregó que en la comunidad de Morales hubo al menos 20 viviendas inundadas, así como dos completamente destruidas.
Desde el mar. Róger Bolandi, vecino de Esterillos Oeste, vivió en carne propia los embates del fenómeno natural.
“Parecía un huracán; casi de inmediato vimos un chispero, escuchamos un estallido, luego se fue la luz. Me refugié en el baño de la casa con mi mamá hasta que pasó el chaparrón.
”El resto de la noche nos la jugamos con una batería de carro que teníamos guardada, pusimos luz y tratamos de pasar la noche esperando la luz del día”, expresó.
Una vez que Bolandi salió de su casa, observó cables y postes del tendido eléctrico caídos.
Otro de los afectados fue Gerardo Meza Cerdas, quien cuida a una muchacha que tiene problemas de salud a raíz de un tumor que le detectaron en el cerebro.
“Ella tuvo unas operaciones en el Hospital México y no puede ver. Cuando nos agarró la tormenta, estaba viendo el partido de la Selección y la casa se empezó a mover. Al llegar a la cocina me percaté de que a la casa le cayó un palo y terminamos mojándonos”, contó Meza.
Ayer, el Comité Local de Emergencias analizaba el caso de cada una de las familias afectadas, y no se descartaba trasladar a algunas a otro sitio para evitarles riesgos. No se detalló cuántas personas afrontaban problemas. “Estamos revisando todas las comunidades pasa así tener una idea de la magnitud de la afectación”, dijo Garro.