Buenos Aires (Upala). Ciento cincuenta familias residentes en los poblados de Buenos Aires y en el asentamiento campesino de Agro Sur, en el cantón de Upala, quedaron aisladas ayer luego de que una avalancha de lodo, procedente del volcán Rincón de la Vieja, obstruyó el puente sobre el río Pénjamo.
El súbito aumento del caudal se produjo unos 25 minutos después de que una gran erupción de ceniza y vapor -a la 1:34 p.m.- provocó expectación, miedo y angustia entre los vecinos de Buenos Aires, Agro Sur y Dos Ríos de Upala.
Anoche, a las 6:52 p.m., otro alud de agua y barro se precipitó a través del río Pénjamo, después de que el macizo volviera a arrojar materiales en medio de retumbos, dijeron voceros de la Cruz Roja de Upala. Al cierre de edición no se tenían informes sobre bajas u otros detalles.
Luego de una relativa quietud, tras una actividad similar en 1991 -cuando el volcán lanzó ceniza y vapor, y hubo avalanchas de barro y agua que elevaron los caudales de tres ríos-, de nuevo el Rincón de la Vieja ha vuelto a inquietar a guanacastecos y upaleños.
El coloso, ubicado en la Cordillera Volcánica de Guanacaste, volvió a sus andanzas el lunes, con una pequeña erupción. Sin embargo, ayer la situación pareció cobrar más fuerza. Los habitantes de Buenos Aires fueron abruptamente sacados de sus camas, a las 4 a.m., cuando se produjeron fuertes retumbos que se repitieron durante el transcurso de la mañana.
No obstante, la Comisión Nacional de Emergencia (CNE) y expertos de la Red Sismológica Nacional y del Observatorio Vulcanológico y Sismológico de Costa Rica (OVSICORI), coincidieron en que, por ahora, es innecesario declarar un estado de alarma para las comunidades aledañas al volcán.
Otra pesadilla
Las erupciones y la avalancha que ayer en la tarde bajó por el río Pénjamo revivieron entre los vecinos de Buenos Aires, Agro Sur y Dos Ríos el susto que un fenómeno parecido les causó el 8 de mayo de 1991. Y tenían razón.
Otra vez un torrente de lodo y agua caliente elevó el cauce del mencionado río... y nuevamente dañó el puente, vital para que los campesinos saquen sus productos hacia las ciudades de Upala o Liberia. Ahora, 150 familias están incomunicadas y a la espera del auxilio del Estado.
Como consecuencia de la crecida, el paso sobre el puente quedó interrumpido, en tanto que el barro, las piedras y los troncos cortaron el camino de acceso a Agro Sur.
Personal de la Cruz Roja y de la Policía de Fronteras, usando cuerdas y trozas, evacuaron a unas 16 familias de parceleros que corrían peligro en ese asentamiento.
La corriente arrasó varias cabezas de ganado del parcelero Gabriel Araya y estuvo a punto de alcanzar a un grupo de jóvenes, quienes osaron acercarse al río para contemplar el fenómeno.
Los retumbos y el temor a avalanchas motivaron a la directora de la escuela del asentamiento campesino de Gavilán -también en Upala- a suspender las clases.
Mientras tanto, vecinos de otros pueblos cercanos a las faldas del coloso, como Nueva Zelanda, y de algunos más alejados, como Potrerillos, de Liberia, reportaron la caída de ceniza en pocas cantidades.
Inspección aérea
Con el fin de hacer una evaluación en el sitio, funcionarios del sector de vulcanología de la CNE y de OVSICORI viajaron ayer mismo a la zona para realizar una primera inspección y programar un recorrido aéreo -hoy- para revisar los cauces de los ríos y la laguna y cráter del volcán.
Asimismo, la CNE dispuso instalar comités auxiliares para la atención de eventuales emergencias en Dos Ríos y Buenos Aires de Upala.
Aunque las autoridades no consideran procedente aún declarar un estado de alarma, sí reiteraron a los vecinos la necesidad de mantener vigilancia sobre los ríos Pénjamo, Azul y Negro.
Colaboró en esta información Rodolfo Martín, redactor de La Nación.
Resignación y angustia
Buenos Aires (Upala). "Se pone todo oscuro y de pronto se viene un estruendo; es algo tremendo. Aquí estamos a ver qué pasa. Será la voluntad de Dios..." Así resumió la situación que vive desde el lunes Dennis Alvarez, un robusto campesino de esta localidad, para quien el despertar del volcán Rincón de la Vieja, al igual que a muchos otros lugareños, lo tomó por sorpresa.
La vida de este tranquilo poblado, adonde se llega tras sortear un empinado camino de lastre, piedra y barro -con carros de doble tracción o a caballo- cambió violentamente en medio de estruendos y torrentes de lodo hirviente.
En un abrir y cerrar de ojos, el río Azul, bautizado así por la limpieza de sus aguas, se convirtió en una oscura corriente que amenaza con socavar un viejo puente de troncos, el cual comunica a las comunidades de Gavilán y Buenos Aires con la ciudad de Upala, en Alajuela, y con Liberia, Guanacaste.
Las escuelas cerraron sus puertas; los campesinos guardaron sus cuchillos y palas, y algunos, de la mano de esposas e hijos, permanecieron ayer cerca del cauce de los ríos Pénjamo y Azul, esperando lo de otros años: avalanchas de lodo caliente expulsado desde el cráter activo del coloso.
"Yo estoy acostumbrada a esto, pero los retumbos son fuertes y uno no sabe qué puede pasar. No me preocupa mucho, pero quién sabe", afirmó María del Milagro Venegas Núñez, vecina de Buenos Aires, mientras intentaba tranquilizar a cuatro niños que se movían inquietos a su lado en el corredor de una casa de madera.
Como ellos, otros vecinos se mostraban ayer angustiados por la actividad del Rincón de la Vieja, que parecía ir en aumento. Eso le sucedió a la profesora Marta Elena Oliver, quien llegó a la zona en marzo pasado, procedente de San José, para asumir la dirección de la escuela del asentamiento campesino Gavilán. "Estaba escribiendo una carta cuando escuché unos fuertes retumbos. Por eso decidí suspender las clases y mandar a los niños adonde sus padres para que los cuiden. No sé qué puede pasar; yo tengo miedo y los chiquitos estaban nerviosos. Es mejor prevenir porque nadie nos dice qué puede suceder."
Sus temores aumentaron a la 1:34 p.m., cuando un hongo de ceniza y vapor surgió del coloso en medio de retumbos. Solo 25 minutos después, un torrente de lodo caliente bajó para dañar el puente que comunicaba a Buenos Aires con Upala y Liberia. Esta vez, la educadora no esperó más. Asustada abordó un pick-up de un vecino y abandonó la comunidad rápidamente. "He topado con cangrejos, arañas, culebras y zancudos... Quiero volver a mi casa", había declarado a La Nación minutos antes.
Este es el volcán
El complejo volcánico del Rincón de la Vieja está ubicado a 24 kilómetros al nor-noreste de la ciudad de Liberia, Guanacaste.
Su cima es una arista alargada y arqueada con dirección nor-sureste y está compuesta, por lo menos, por nueve focos eruptivos. Su máxima altura es de 1.895 metros sobre el nivel del mar. Estas son sus principales características:
Tipo
El Rincón de la Vieja responde a las características de un estratovolcán complejo, lo cual significa que se formó por la sedimentación de lava y ceniza. Igualmente, es producto del crecimiento de varios volcanes en un solo macizo, contrario a lo que le ocurre en el caso del Arenal (un solo estratovolcán, menos complejo).
Actividad
En el Rincón de la Vieja, las fumarolas son la actividad tradicional, lo cual significa un estado normal de equilibrio. Las columnas de vapor son provocadas por el recalentamiento que sufre el agua del cráter o la laguna.
Tal aumento de temperatura, a su vez, es causado por los gases que emergen, entre piedras y rocas quebradas, a través de una chimenea de aproximadamente un kilómetro de profundidad.
Los gases, mientras tanto, son producto de la lava en enfriamiento que se encuentra en el fondo.
Cuando ese estado de equilibrio se rompe, desaparecen -parcial o totalmente- las fumarolas y la laguna, ante la explosión que antecede a la erupción de lodo, piedras y ceniza.
Historia
El Rincón de La Vieja registra alrededor de 13 importantes ciclos de erupciones durante los últimos 300 años.
El período de mayor actividad, en toda la historia del volcán, está enmarcado entre setiembre de 1966 y agosto de 1970.
Una serie de nuevas erupciones se produjeron en febrero de 1983 y marzo de 1984; también en setiembre de 1985, abril de 1986 y a finales de ese último año y principios de 1987.
La más reciente erupción del Rincón de la Vieja tuvo lugar entre el 6 y el 8 de mayo de 1991.
Fuente: Los volcanes de Costa Rica, de Guillermo E. Alvarado Induni. Además, informes brindados por el vulcanólogo Gerardo Soto Bonilla, de ICE-RSN.