Cutris de San Carlos. Jorge Durán Alfaro, de 76 años, murió el jueves pasado de un paro cardiorrespiratorio durante el paso del huracán Otto por Moravia de Cutris, en San Carlos.
Este agricultor se desvaneció sin que nadie se diera cuenta mientras estaba en una silla del corredor de la casa de Felipe Ramírez Pérez, donde habitaba desde hacía siete años.
Durán, quien estaba acompañado por varios miembros de la familia Ramírez, veía como el viento se iba incrementado y las ráfagas movían con fuerza las ramas de los árboles.
“Antes de que comenzara a llover estuvo hablando. Se mostró tranquilo y comentó que los huracanes no lo asustaban. Decía que a lo largo de los años había experimentado muchas inundaciones y temblores.
”Pero vieras que cuando era torrencial el aguacero y aparecieron los vientos, don Jorge cambió. Yo lo ví como asustado, pálido, raro. Le pregunté que si era que sentía algún dolor y me dijo que no. Pero me dijo que se sentía incómodo por lo que estaba pasando. Al rato, cuando la cosa se calmó , nos dimos cuenta de que no se movía. Se murió sentado. No gritó ni dijo algo que nos hiciera ver que sentía dolor. Si me sorprendió”, relató don Felipe.
Levantamiento. Mauricio Solís, jefe de la subdelegación del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) de Los Chiles, que atiende esa zona, explicó que recibieron el reporte sobre la muerte de Durán y acudieron hasta la vivienda en Moravia.
No obstante, indicó que luego de indagar sobre la forma del deceso y debido a que el médico que atendía al adulto mayor emitió un certificado en el cual detalló la causa de la muerte, el cuerpo no fue llevado a la Medicatura Forense.
Solís consideró que en este caso se puede hablar de una víctima indirecta del huracán.
Un caso similar sucedió ese mismo jueves, pero en San Isidro de Aguas Claras, en Upala, donde Juana Guerrero Agüero, de 59 años, murió de un paro.