La laguna de agua fría del volcán Irazú se secó y, ahora, en el fondo del cráter pueden observarse rocas provenientes de deslizamiento internos y sedimentos finos con grietas de desecación.
El vulcanólogo Raúl Mora Amador, del Centro de Investigaciones en Ciencias Geológicas de la Universidad de Costa Rica (UCR), dijo que es posible que la desaparición se deba a un descenso en las lluvias por el fenómeno de El Niño.
Precisó que la última vez que el lago se secó fue en 1991 y que se necesitaron varios meses para que se volviera a formar y recuperara su nivel normal.
La laguna fría ( llamada así porque tiene una temperatura similar al ambiente) llegó a tener un nivel arriba de los 30 metros a principios de la década. Desde hace cinco años se comenzó a secar. Se estima que en ese lapso se perdieron alrededor de 500.000 metros cúbicos de agua.
Mora dijo que en el volcán no se han observado cambios abruptos en la sismicidad, pero sí se han reportado temblores en fallas.
Agregó que las fumarolas en la ladera norte mantienen temperaturas entre 60 y 88 grados Celsius, igual a como hace años.