Osa
Un hombre de apellido Zuluaga, de 55 años, fue aprehendido y puesto a la orden del Ministerio Público como sospechoso de amenazar con arma de fuego a los trabajadores de una vivienda en Sierpe y de intentar agredir a su exesposa.
El sujeto tenía 22 días de haberse separado de su esposa, de apellido Castillo y, afectado por los celos, llegó de nuevo a la vivienda con un arma de fuego y gran cantidad de municiones, indicó Olman Quesada, oficial de la Fuerza Pública que atendió el caso.
El sujeto quedó libre pero con medidas cautelares como prohibición de acercarse a Sierpe.
Las armas fueron trasladas al Arsenal Nacional de acuerdo con una orden del Ministerio de Seguridad girada desde enero del 2012 y avalada en agosto del 2013 por la Sala Constitucional.
Se establece que las personas con antecedentes penales por violencia doméstica, narcotráfico, delitos contra la propiedad o delitos contra la vida no pueden portar legalmente armas de fuego.
La directriz también permite que se revoquen los permisos que ya fueron otorgados a sospechosos de esas faltas.