EscucharUn albañil nicaragüense de apellido Sosa, de 23 años, fue detenido a las 9:40 a .m. de este jueves en La Fortuna de San Carlos como sospechoso de asesinar al ganadero Adrián Solano Soto, de 74 años.
La captura la hicieron agentes del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) cuando Sosa, al que buscaban desde enero del 2014, estaba trabajando en la construcción de un hotel en La Fortuna, población turística adonde había llegado meses atrás.
El delito se produjo entre la noche del 31 de diciembre del 2013 y la madrugada del 1.° de enero del 2014.
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Durante casi dos años el sospechoso logró evadir la acción de la Policía, pero este jueves quedó a la orden de la Fiscalía. (Carlos Hernández)
En el operativo participaron agentes del OIJ de Cañas, La Fortuna y oficiales de la Policía Turística, quienes tomaron por sorpresa a Sosa, por lo que el joven no tuvo tiempo de escapar.
El albañil fue trasladado inmediatamente a Cañas para ponerlo a disposición de la Fiscalía local, encargada del caso.
El OIJ hará al menos un allanamiento más en las próximas horas en busca de evidencias relacionadas con el homicidio, entre ellas el arma de fuego usada para acabar con la vida de Solano.
La Policía no descarta que en el hecho participara un segundo sujeto, lo cual es parte de las pesquisas.
Robo fue el móvil. El escenario del crimen fue la vivienda de Solano, en Santa Rosa de Tilarán, Guanacaste, comunidad donde había vivido siempre y donde se dedicaba a la cría de ganado y producción de leche.
La muerte violenta del finquero fue descubierta por su hijo Rónald, el 1.° de enero del año pasado, cuando se dirigía a la lechería a ordeñar y le llamó la atención ver entreabierta la puerta principal de la vivienda de su progenitor, quien meses antes había enviudado.
Al ingresar se encontró con que en la vivienda había un gran desorden, algunos ventanales rotos así como indicios de que las puertas habían sido forzadas.
Tras avanzar un par de metros, halló a su padre sin vida, tirado en el piso con un impacto de bala en la sien derecha, un cuchillo incrustado en el cuello y abundantes manchas de sangre.
Además, descubrió que faltaba una pantalla de televisión, un revólver y un rifle, entre otros objetos. Tales faltantes llevaron a los agentes judiciales de la delegación de Cañas a concluir que al ganadero lo mataron para robarle.
A Sosa también lo investigarán para determinar si participó en asaltos a comercios en La Fortuna cometidos desde octubre pasado, ya que es dueño de una motocicleta con características similares a la usada en los atracos.
