La Cruz. El sospechoso de asesinar a machetazos a tres peones en una finca en Santa Cecilia de La Cruz, Guanacaste, huyó hacia su país, Nicaragua.
Al sujeto se le conoce como el Loco, y el domingo se le vio caminar con un machete en la mano y cruzar la línea fronteriza, según confirmaron las autoridades locales.
A eso de las 10 a. m., un hombre que iba en bicicleta encontró un cadáver. La Policía descubrió luego que eran tres y uno estaba decapitado.
Las autoridades creen que el móvil fue el robo.
Las víctimas fueron los nicaragüenses Arcides Arroligia Zúñiga, de 70 años; Fidel Maldonado Aguilar, de 25, y otro joven de 27 años, conocido como Víctor y apodado Buey Lucio. Este último había pasado los últimos días sin trabajar y pretendía regresar a Nicaragua.
Omar Brenes, jefe del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) en Liberia, detalló que los restos de los fallecidos quedaron en un radio de 50 metros.
El jefe policial resaltó que ahora el problema es tener acceso a investigar en el país vecino.
Según dijo, en octubre del año pasado se dio un homicidio de otro nicaragüense en esa finca y el sospechoso también era de esa nacionalidad.
Al parecer, el homicida huyó a su país, pero, cuando el OIJ intentó indagar allá, no se permitió el acceso a agentes.
Lo mismo señaló ayer el director del OIJ, Francisco Segura, quien añadió que se está pidiendo ayuda a la Policía Nacional de Nicaragua.
Los acompañó. Las víctimas se alojaban en un rancho, dentro de una finca naranjera en la que trabajaban, cerca de la frontera. Ahí también se quedaba el Loco, aunque él no había estado laborando.
Cecilia López , quien les vendía comida, recordó que el domingo a las 4:15 a. m. los tres peones iban hacia Nicaragua a “comprar unas cositas”. El sospechoso dijo que los acompañaría y los cuatro se fueron.
El grupo tenía que caminar alrededor de una hora para llegar a Cárdenas de Nicaragua.
Al parecer, caminaron unos cinco kilómetros hasta que llegaron a otra propiedad de 4.000 hectáreas, dedicada a la siembra de árboles de teca.
Rafael Araya, jefe de la Fuerza Pública de La Cruz, comentó que, aparentemente, ahí el agresor atacó primero al más joven y lo hirió en el cuello.
De inmediato lanzó el machete contra las piernas de los otros dos hombres y los dejó heridos, por lo que no podían huir.
Posteriormente, se volvió hacia el que agredió primero, quien intentaba huir por un riachuelo y lo mató.
Luego, según los informes preliminares, asesinó a los otros dos peones.
Supuestamente, las víctimas llevaban alrededor de ¢200.000 entre los tres; sin embargo, en el sitio no se encontró dinero.
La Policía dijo que solo halló un saco y una bolsa de yute con naranjas y malangas.
Estos extranjeros ingresaban y salían con frecuencia de Costa Rica desde diciembre. Sus familias residen en Nicaragua.
Sus cadáveres fueron remitidos a la Morgue Judicial en Liberia, para que se les realice la debida autopsia.
Problemático. El sospechoso de este triple asesinato no era querido en la zona.
Los lugareños sabían que usualmente robaba. Incluso, uno de los trabajadores asesinados iba a comprar ropa porque el Loco le sustrajo otra.
Rafael Araya, jefe de la Fuerza Pública de La Cruz, dijo que al sospechoso se le había sacado del país por su situación migratoria irregular pero volvió.