En cuestión de ocho horas y en dos hechos separados, dos hombres murieron por disparos que recibieron en la parte posterior de la cabeza.
Uno de los casos se registró el jueves en la noche en Corredores, Puntarenas, y el otro la mañana de este viernes en Pueblo Nuevo de Limón.
El Organismo de Investigación Judicial (OIJ) informó de que las víctimas también estaban amarradas de pies y manos con gazas plásticas.
Walter Espinoza Espinoza, director de la Policía Judicial cree que la similitud en los homicidios habla de la forma en la que operan ciertas bandas de delincuentes.
"Son prácticamente idénticos (los asesinatos). Ambos cuerpos estaban atados de pies y manos con gazas plásticas, ambos fallecen como consecuencia de los impactos que tienen en la cabeza (...), eso indica que es una modalidad de muerte. Una manera de matar, un método elegido por algunas agrupaciones criminales para acabar con la vida de algunas personas (...) todo parece apuntar que hay un tema delictivo detrás".
Primer caso. El primer caso reportado sucedió a las 9:30 p. m. en La Bota de La Cuesta de Corredores, muy cerca de la frontera con Panamá.
El reporte inicial hablaba de un carro incendiado. Cuando llegaron las autoridades, determinaron de que a nueve metros del vehículo estaba el cuerpo de un hombre de unos 40 años, cuya identidad se desconocía.
Espinoza reconoció que aún no se tiene claro que relación hay entre el carro y el fallecido. Agregó que están buscando al dueño registral, para ver qué pasó con ese vehículo.
En cuanto al fallecido, se confirmó que no portaba ningún documento que ayude a conocer su nombre.
Segundo hecho. El otro crimen se descubrió este viernes a las 5:30 a. m. en Ojo de Agua, en Pueblo Nuevo de Limón.
Se trata de Josué Espinoza Loría, de 26 años, cuyo cuerpo apareció a un lado de la carretera. El fallecido fue investigado por robo agravado y por atentar contra la autoridad.
La Policía Judicial confirmó que el pasado 8 de mayo, Espinoza había sido objeto de una agresión. En esa ocasión el afectado se encontraba a las 2:30 a. m. en un bar en el centro de Limón, cuando llegó un individuo y le disparó en múltiples ocasiones. Espinoza resultó herido en glúteos y abdomen.