El dueño de una finca en La Rambla de Puerto Viejo, Sarapiquí, se llevó una sorpresa este lunes a las 4 p. m. cuando fue a buscar al cuidador y no le contestó. Al abrir, lo halló tirado en la entrada de un cuarto, a tres metros de la puerta, con las manos atadas y sin vida.
El hallazgo fue 500 metros al al sur de la antigua universidad de estudios tropicales en esa zona de Heredia.
Se trata de un sector solitario en el que la casa más cercana queda a 50 metros. Cerca del lugar queda una empresa de exportación de helechos.
La víctima, de 70 años, fue identificada como Rodrigo Chavarría Soto, quien vivía en la propiedad y tenía 10 años de trabajar con el dueño de la finca, el cual es vecino de Horquetas, Sarapiquí.
Freddy Santamaría, de la Fuerza Pública local, dijo que el dueño llegó a buscarlo porque ayer no le contestó las llamadas telefónicas. El cuerpo tenía las manos atadas hacia atrás y un golpe en la cabeza, al parecer propinado con con tubo.
El posible móvil es el robo, pues el hombre retiraba una pensión y el dinero lo guardaba junto con lo que se ganaba en chapeas y en el cuido de la finca. Se estima que le robaron aproximadamente ¢500.000 que tenía debajo del colchón, el cual estaba revolcado.
A las 7:25 p. m. de este lunes los agentes del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) levantaron el cuerpo y mañana realizarán un rastreo en la parte externa de la propiedad, en aras de encontrar nuevas evidencias y tratar de dar con los homicidas.
Chavarría no tenía esposa ni hijos, por lo que solo un hermano lo llegaba a visitar de vez en cuando.
Esta noche el hermano dijo que Rodrigo no tenía problemas con nadie y que se ganaba el jornal en chambas y cuidando la propiedad.
El caso quedó en investigación.