Un hombre al que no se le conoce trabajo alguno es señalado por la policía como el líder de una organización delictiva a la que se le atribuye cometer al menos cinco asaltos en los cantones de San Carlos y Los Chiles, de Alajuela, entre diciembre y febrero.
Michael Soto, jefe de la Oficina de Planes y Operaciones (OPO) de la Policía Judicial, dijo que esta organización se apoderó de una suma superior a los ¢10 millones en los atracos.
Agregó que la banda tenía una particularidad en su forma de actuar, pues inicialmente llegaba un miembro del grupo para entablar amistad con las víctimas y luego ingresaban los cómplices con armas de fuego, con las cuales los intimidaban. En ninguno de los hechos hirieron a los afectados.
El OIJ atribuye a la banda el asalto a dos viviendas, una planta hidroeléctrica, un camión repartidor y un bar. No se descarta que pueda estar relacionada al robo de dos gasolineras.
El cabecilla, de apellido Rodríguez, de 38 años, fue detenido por agentes del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) en una casa de su propiedad en Los Ángeles de Pocosol de San Carlos. En ese mismo lugar se arrestó a su compañera, una mujer de apellido Sánchez de 31 años.
Entre tanto, a otros cuatro cómplices de la banda de apellidos Urbina (33 años), Campos (43), Enríquez (28) y Solís (18), los arrestaron en San Juan de Ciudad Quesada, San Jorge, Las Brisas (ambos de Los Chiles) y en el precario la Margarita de Ciudad Quesada, repectivamente.
Yanori Ugalde, jefa del OIJ de Ciudad Quesada, dijo que para capturar a los implicados se realizaron seis allanamientos, en los cuales se contó con la participación de más de 85 efectivos del OIJ y 30 de la Fuerza Pública.
Agregó que en las acciones policiales no fue posible decomisar armas pero se sospecha que las tienen escondidas en algún lugar cercano.
Asimismo, dijo que el grupo tenía planeado dar un golpe a un almacén de electrodomésticos el miércoles en la noche, pero por razones que se desconocen abortaron el atraco.