Los atropellos, choques viales, asfixias por tragar objetos pequeños, ahogamientos o intoxicación con venenos mataron a 318 niños entre el 2009 y 2013.
De acuerdo con los datos de la Morgue Judicial, después de las muertes por causas naturales, los niños fallecen más por accidentes que por cualquier otra razón.
En esos cinco años, se le realizó la autopsia médico-legal a 1.229 niños, de los cuales 680 murieron de manera natural (55,3%), 318 por accidentes (25,9%), 74 por homicidios (6%) y el resto por causas indeterminadas, suicidas o el resultado quedó pendiente.
De las 4.918 muertes accidentales registradas en el país, que incluye adultos, el 6,4% (318) fue de niños entre 0 y 12 años. Es decir, 64 menores fallecen cada año, en promedio, de manera accidental.
Los percances de tránsito (colisiones y atropellos) ocuparon el primer lugar de muertes en niños, al sumar 119 víctimas (37,4%). Le siguieron las asfixias por sofocaciones con objetos y las asfixias por sumersión (ahogados), que en conjunto cobraron la vida de 116 pequeños (36,4%). Posteriormente, hubo muertes accidentales durante el parto (4,4%) o por intoxicaciones con gasolina y agroquímicos (2,8%), entre otras causas.
De acuerdo con los registros, casi la mitad de las víctimas de accidentes falleció en un centro médico, el 22% en vía pública, el 14% en medios acuáticos (ríos, pozas, piscinas, mar), el 12% en el domicilio y el resto en otros sitios.
Las autopsias revelaron el nivel de violencia con que mueren los menores en accidentes viales, quienes mayoritariamente sufrieron traumas cerebrales. En el caso de las asfixias por sofocación, se detalló que a los niños se les obstruyeron las vías con almohadas, bolinchas, semillas de mamón, nances y otros objetos pequeños.
Poco mas de la tercera parte de los menores accidentados tenían entre 1 y 4 años, el 27% era menor a un año, y el 38%, entre 5 y 12 años.
Negligencia. Olga Arguedas, subdirectora del Hospital Nacional de Niños, reconoce que en Costa Rica hay problemas muy serios en cuanto a la crianza de los pequeños. “Algunos padres, sobre todo muy jóvenes, en condiciones socioeconómicas bajas o de etnias indígenas, tienen muy pocas habilidades para la crianza de sus hijos, que incluye el cuidado preventivo”, dijo.
Ana Teresa León, presidenta del PANI, señaló que crean una campaña para contrarrestar los descuidos que afectan a los niños, y pretenden llamar la atención para que los menores no se dejen solos y no tengan acceso a fósforos, productos tóxicos u objetos pequeños.
Para Francisco Segura, director del OIJ, lo que se desprende de las muertes accidentales es el descuido de los cuidadores. “Hay una irresponsabilidad por negligencia cuando vemos chiquitos cuidados por otros chiquitos o que se asfixian porque nadie los vio”, dijo.