El segundo sospechoso del homicidio del coreógrafo José Andrés Murillo Arroyo (34 años), ocurrido el pasado 12 de febrero, fue recapturado anteayer y enviado a descontar prisión preventiva.
El Tribunal Penal de Heredia dictó dos meses de prisión para el sujeto, de apellido Alfaro (20 años), luego de recibir una apelación de la Fiscalía ante el inminente peligro de que se fugara y obstaculizara la investigación.
Inicialmente, el Juzgado Penal de Heredia había impuesto, el 14 de febrero, dos meses de prisión para uno de los implicados , de 25 años.
Este individuo es primo del segundo sospechoso, el cual había quedado libre con medidas como impedimento de salida del país, firmar una vez a la semana y la prohibición de acercarse a personas relacionadas con el caso.
Algunos conocidos del medio del espectáculo nacional quedaron sorprendidos por la noticia y se mostraron muy afectados por este homicidio.
Pocos días después del crimen, un grupo en Facebook comenzó a protestar para que se hiciera justicia tras enterarse de que uno de los sospechosos había quedado libre.
El grupo en la red social se llama “ Justicia en el caso de José Andrés Murillo ” y, hasta ayer a las 6 p. m., tenía 9.428 seguidores.
El 19 de febrero, incluso, decenas de personas, entre amigos y familiares de Murillo, protestaron en la plaza de Belén, Heredia.
Recuento. El crimen de José Andrés Murillo trascendió en Barreal, cuando la Policía detuvo un vehículo y halló dentro a la víctima, que tenía golpes, la cara tapada y las manos amarradas.
Murillo era un instructor físico, coreógrafo, auditor del Instituto Nacional de Aprendizaje (INA) y coordinador de eventos.
Los dos sospechosos se encontraban dentro del vehículo y ambos son vecinos de Heredia. El mayor de ellos es un cocinero y el otro es modelo. Ninguno registra antecedentes penales.
La noche del crimen, una llamada al sistema de emergencias 911 alertó a las autoridades, hacia las 11 p. m., de que dos sujetos se encontraban vapuleando a una persona dentro de un automóvil negro, marca Peugeot.
Francisco Morales, jefe regional de la Fuerza Pública, había indicado que el informante reportó que la víctima pedía auxilio a gritos, cerca de la delegación de Tránsito en Santa Cecilia, en San Francisco, Heredia.
Cuando las autoridades llegaron al lugar, no encontraron el automóvil, por lo que iniciaron un operativo para localizarlo, y, tras una persecución, lo interceptaron en Barreal de Heredia, frente a la empresa Mayca.
Morales indicó que los sujetos, al intentar escapar, se estrellaron contra la malla de Mayca y, en ese momento, los agentes rodearon el Peugeot.