Una banda que cobraba $15.000 a cada dominicano que traía de manera ilegal a nuestro país, fue desarticulada por la Policía de Migración. Según la pesquisa de la Unidad de Investigación, la banda trajo al país a más de 30 personas.
Las autoridades realizaron ayer un allanamiento en La Aurora de Alajuelita, donde detuvieron a la presunta líder de la banda, una dominicana de apellido Díaz, naturalizada costarricense.
La Policía también allanó una casa cercana a la terminal de buses de Puntarenas, en el centro de San José, para detener a otro de los involucrados, de apellido Peña, pero no se encontraba en ese momento.
Freddy Montero, viceministro de Gobernación, explicó que desde julio del 2012 comenzaron a seguirle el rastro a la banda.
En primera instancia, determinaron que la agrupación traía dominicanos y entraban por vía terrestre usando puntos ciegos de las fronteras de Panamá y Nicaragua.
“Esta banda les facilitaba a ellos (los dominicanos) la presentación de las solicitudes para la naturalización. Hacían simular matrimonios con costarricenses, y falsificar y modificar documentos oficiales para presentarlos y lograr la naturalización”, dijo el funcionario.
Después les entregaban documentos de identidad falsificados y, en muchos casos, los ubicaban en sitios como Jacó de Garabito, Osa y Ciudad Cortés, así como en San José y Cartago,
Meses atrás, a esta misma banda la Policía le había decomisado $410.000 en efectivo y medio kilo de cocaína, lo cual hace pensar a las autoridades que la organización delictiva incursionaba en el tráfico internacional de cocaína y legitimación de capitales.
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