Corredores. El veneno de una serpiente terciopelo mató ayer al peón agrícola Valentino Barrantes Gómez, de 54 años, quien chapeaba en una finca de palma en La Cuesta, cantón de Corredores, Puntarenas.
Un compañero de trabajo del fallecido, Jorge Arroyo, dijo que el hecho se produjo a las 12:35 p. m. en la finca El Celaje.
El testigo manifestó que, en primera, instancia acabó con la culebra y debido a que Barrantes no podía mantenerse en pie salió a buscar ayuda.
“Debí caminar dos kilómetros hasta una carretera y ahí debí esperar a que pasara alguien con un teléfono”, relató.
La Fuerza Pública de La Cuesta informó de que cuando llegaron al sitio acompañados por cruzrojistas, ya eran las 2:15 p. m. y el trabajador había fallecido.
Fulminante. Arroyo detalló que el ataque se produjo cuando Barrantes majó al reptil.
“Me gritó: ‘Me mordió una culebra’. Se quitó la bota (de hule) y de viaje se le notaba. El colmillo le atravesó el calzado.
“Lo pegó en el dedo pulgar del pie izquierdo. Busqué la culebra, que era como de metro y medio, y le di varios cuchillazos. Mi compañero en 10 minutos no se sostenía, y cayó”, contó Arroyo.
Juanita Zúñiga, compañera sentimental de Barrantes, dijo que cuando le avisaron del accidente se fue corriendo para la finca, pero que cuando llegó no había nada que hacer. Agregó que ayer Barrantes salía a las 2 p. m. porque debían ir a La Cuesta para realizar algunas compras.
Otro caso. También ayer a las 3 p. m. un helicóptero del Servicio de Vigilancia Aérea (SVA) del Ministerio de Seguridad Pública trasladó al hospital de Golfito al niño Maikol Santos Prado, de 12 años, quien fue mordido por una serpiente bocaracá. De acuerdo con la información oficial, la aeronave recogió al paciente en la Carona de Punta Burica.