San José (Redacción). Los familiares de Karol Solano Salas (21 años), quien falleció esta madruga en un choque en el puente del río Virilla (entre La Uruca y Heredia), lamentaron que ella no llevara puesto el cinturón de seguridad.
Solano murió al salir expulsada por el parabrisas del carro de la marca Honda Civic, en el que viajaba en el asiento de copiloto, con su pareja y dos amigos (estos últimos también fallecidos).
Esta mañana, en Pavas, en la vivienda de los familiares, quienes se encontraban consternados, la hermana de la fallecida, Silvia Solano, contó a La Nación que su hermana había salido a departir con su pareja y los amigos.
“Mi hermana era muy alegre, tenía una relación estable desde hace como cinco años con el novio. Él fue quien nos llamó en la madrugada para darnos la terrible noticia, lamentablemente ella no llevaba el cinturón al momento del accidente, si lo hubiera llevado, tal vez podría estar viva”, expresó Solano.
El Organismo de Investigación Judicial (OIJ) confirmó que debido a que la joven salió expulsada por el parabrisas y a que su cuerpo no mostraba marcas del cinturón, se cree que, efectivamente, la muchacha no portaba el dispositivo de seguridad.
Las otras víctimas mortales de este caso fueron Kevin Andrés Britton y Jorge Calvo, ambos de 23 años, fallecieron en el lugar del accidente.
Mientras que el conductor, de apellido Guzmán y de 35 años, quien era el compañero de Solano, fue detenido por el OIJ debido a que la alcoholemia resultó positiva. Él fue trasladado al Ministerio Público con cargos de tres homicidios culposo.
Ulate trabaja elaborando tatuajes un estudio en su vivienda, mientras que Karol era cajera en un local de comida rápida en Paseo Colón. La pareja residía en Pavas, de donde también eran vecinos los otros dos fallecidos.