"Estamos impactados, todavía no se nos pasa. Es muy difícil asimilarlo. El viernes (durante la celebración del día del niño) se le vio tan feliz, ese día lo pintaron como el hombre araña..."
Libia Rodríguez Castro, directora de la escuela Tobías Guzmán Brenes, del centro de San Mateo de Alajuela, narró el impacto del accidente ocurrido el domingo anterior en la ruta 27, en Coyolar de Orotina.
Una de las cinco víctimas era un niño de siete años, que cursaba el primer grado; en tanto, otro fallecido, Jason Mora, era hermano de otro escolar de tercer grado.
"El golpe es doble porque en esta comunidad la mayoría de la gente se conoce y ellos (los escolares) saben quienes eran.
"Estamos en semana cívica y siempre es una algarabía. Vieras como cuesta con los niños para que hagan silencio, pero hoy (este lunes) fue diferente.
"Lo que había era llanto, angustia. Esa cara de tristeza de los niños. Todos callados, demasiado silencio. Nadie quería hablar y me tocó a mi darles unas palabras. Lo que hice fue tratar de decirles que es un angelito y que pasó directo al cielo", dijo Libia Rodríguez.
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En el centro educativo Tobías Guzmán estudian 243 alumnos. La jornada es de 7 a. m. a 2:20 p. m. El niño fallecido compartía un aula con otros 16 compañeros. Cada pupitre tiene el nombre del alumno. El niño fallecido ocupaba el primer campo en la primera fila de la derecha.
Este niño formaba parte del equipo de fútbol de la escuela, cuyas edades están entre 7 y 9 años.
Este lunes el grupo de la maestra María Elena Ávila no tuvo clases, pues la educadora debía participar en una actividad de la Asociación Nacional de Educadores (ANDE) en Guanacaste. Sin embargo, debido al accidente, Ávila desistió de ir a la reunión.
"No hemos podido hablar directamente con los compañeritos de él. No sabemos que reacción puedan tener aunque sabemos que los padres les han estado hablando para cuando vean el cuerpo", dijo Rodríguez.
Las otras víctimas
Respecto a las otras víctimas y que eran vecinos de San Mateo, se determinó que Norma Molina González era dueña, con su actual esposo, de la soda La Pista, ubicada en la ruta 27, cerca de la delegación de la Policía del Tránsito en Pozón de Orotina.
Marco Peraza Molina laboraba en la instalación de vidrios y Jason Mora Guerrero ayudaba a su padre en una carnicería en el centro de Orotina.
La quinta víctima es Gilbert Umaña Rodríguez, de 77 años, vecino de Río Oro, en Santa Ana de San José.