Parrita. “Perdón, perdón, es que me dormí”, fue lo primero que pudo decir el aturdido conductor, mientras trataba de rescatar a su familia de las retorcidas latas del carro.
Eso le escucharon decir algunos vecinos que acudieron a ayudar, luego de que un estruendo los sacara abruptamente de la cama.
La tragedia ocurrió ayer a las 2 a. m. El vehículo conducido por Dionisio Saavedra Hernández, de 38 años, se salió de la calle y chocó contra un árbol en la entrada a playa Bejuco, en Parrita, Puntarenas.
En el accidente perdieron la vida la esposa del chofer y un hijo. Otros dos menores de edad resultaron heridos de gravedad.
El Organismo de Investigación Judicial (OIJ) identificó a la fallecida como Karla Vanessa Ulate Rovira, de 35 años, y al niño como José David Saavedra Ulate, de 9.
Los heridos fueron Randal Antonio y María Saavedra Ulate, de 16 y 7 años, respectivamente. Ambos fueron llevados al Hospital Max Terán de Quepos.
Mientras tanto, el chofer sufrió golpes. Este hombre es funcionario de Migración en el aeropuerto Juan Santamaría.
Truncado paseo. Los afectados forman una familia oriunda de La Guácima de Alajuela. Se dirigían hacia la zona sur del país para realizar compras.
Tatiana Chavarría Quirós, vecina de playa Bejuco, comentó que tras escuchar el golpe, salió y observó a un carro que había colisionado contra un árbol de guácimo.
“El señor que venía manejando pedía ayuda para su familia. Fue impactante porque él decía: ‘perdón, perdón, es que me dormí’”, relató la mujer.
Por su parte, Édgar Carrillo, director de la Clínica de Parrita, comentó que al llegar al lugar se encontró con cuatro pacientes fuera del vehículo y una mujer prensada dentro del carro.
Carrillo acompañó a la niña de 7 años y al otro de 9 al centro médico. “Ese era el más grave. Se intentó entubar pero se hizo muy difícil. Se envió al hospital (México) pero luego nos informaron que había fallecido”, relató.
El médico agregó que, al regresar a la escena, ya habían liberado a la mujer. “Ella entró en paro cardiaco. Se le hicieron maniobras, pero fue imposible salvarle la vida. Falleció en la clínica”, explicó.
Además, indicó que el adolescente de 16 años presentaba traumas en el rostro y una posible fractura de cadera.
Hernán Vega, oficial de Tránsito, comentó que en la calle no quedaron señales de frenado y que el árbol evitó que el auto cayera a una acequia. La alcoholemia practicada al chofer salió negativa.