Un abogado de apellido Pacheco, de 34 años, hijo del exdiputado socialcristiano Ovidio Antonio Pacheco Salazar (1998-2002), es sospechoso de haber mentido en una causa de homicidio por atropello.
En la investigación también figura un hombre apellidado Garbanzo, de 32 años, como posible responsable del homicidio culposo y de lesiones culposas.
Según la Fiscalía de San José, Pacheco es dueño de un carro Hyundai Tucson que era conducido por Garbanzo cuando arrolló a dos motociclistas y causó la muerte de uno de ellos, en San José.
El hecho ocurrió el 4 de agosto del 2014 en barrio México, en el norte de la capital. La víctima fue el mecánico Carlos Fernando Solís Noguera, de 29 años.
De acuerdo con la Fiscalía, horas después del suceso, el dueño del carro se presentó ante el Organismo de Investigación Judicial (OIJ) y aseguró que le habían robado el auto.
Sin embargo, posteriormente se presentó con su abogado, “retiró la denuncia, indicando que en realidad nunca le robaron el vehículo, sino que él se lo prestó a su amigo Garbanzo”, comunicó la Fiscalía.
Por ello, a Pacheco se le acusa de simulación de delito.
Velocidad. La pesquisa realizada hasta el momento señala que Garbanzo viajaba solo y a alta velocidad cuando impactó a los motociclistas y otros cuatro autos.
Los testigos dijeron que después se bajó del auto, habló por teléfono y se fue del lugar.
La Fiscalía detalló ayer que los dos imputados fueron indagados el 6 de octubre y que están libres sin medidas cautelares.
Además, informó de que se han realizado cuatro reconocimientos físicos y el próximo se hará el 5 de mayo.
La entidad también indicó que el motociclista víctima de lesiones culposas debe ser examinado nuevamente transcurrido un año del hecho, para determinar las secuelas.
Clama por justicia. El lunes, la madre del motociclista fallecido, Patricia Noguera, pidió públicamente que las autoridades no abandonen este caso.
La mujer dijo lamentar que el sospechoso y el dueño del carro no tengan medidas cautelares.
“Están libres, están gozando porque, de hecho, me di cuenta de que uno de ellos entra y sale del país como si nada”, expresó.
La madre dijo que nunca olvidará aquel día en que su hijo volvió a sacar la moto que tuvo guardada seis meses.
“Yo no quiero que esto quede impune, porque imagínese que ese día yo venía con mi papá, un señor de 80 años, y con un menor de 10 años , y era tan impactante la escena: mi hijo estaba tirado en el piso y era demasiada la sangre que le salía”, narró.
La mujer pidió consejo al abogado Javier Vargas, quien aprovechó para instar a los diputados a endurecer los castigos por homicidios culposos.