Tres videos serán claves para tratar de aclarar el procedimiento que siguieron los ladrones para robar 80 armas de fuego de la Armería Polini, ubicada en avenida 1, calles 1 y 3, en el centro de San José.
Francisco Segura, director interino del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), explicó que se trata de las filmaciones de las cámaras que tiene en la avenida primera el Ministerio de Seguridad Pública (hay dos a diez metros de la armería), y de otra que está dentro del negocio.
La idea, al revisar 82 horas de grabaciones, es determinar la hora de ingreso, la de salida y cuántos sujetos fueron los que cometieron el robo. Además, saber si utilizaron algún vehículo para escapar.
La Armería Polini se cerró el sábado, a las 5 p. m., y se volvió a abrir el lunes, a las 10 a. m., momento en que el administrador del establecimiento descubrió el robo y avisó a las autoridades.
Acceso. Francisco Segura manifestó que los ladrones abrieron con llaves los candados de la cortina metálica y luego rompieron el llavín de la puerta principal.
Agregó que luego ingresaron a una bodega de seguridad, la cual tenía tres candados, los cuales fueron cortados. De esa bodega se llevaron 80 armas de fuego de calibres 22, 38 y 9 milímetros, que son las armas que normalmente están en exhibición en la tienda, informó la Policía Judicial.
Francisco Segura dijo que hay pistolas, revólveres y rifles, pero el OIJ todavía no tiene la cantidad exacta de cada una de ellas, pues la empresa dueña de las armas está realizando un inventario.
El director interino del OIJ lamentó este tipo de situaciones: “El problema de las armas es que se las roban a personas que las tienen de manera lícita y van a dar al mercado ilícito. Esas armas son para cometer delitos”.
Agregó que el mismo patrón se siguió con el robo, el 30 de enero, de 215 pistolas de 9 milímetros en una bodega de la Policía de Tránsito, en plaza González Víquez. Se han recuperado 78 pistolas.
También está la sustracción (el pasado 5 de julio) de cinco escopetas y cinco pistolas de las oficinas administrativas de la Refinadora Costarricense de Petróleo (Recope), en Limón.